“Mas a Jehová vuestro Dios serviréis, y él bendecirá tu pan y tus aguas; y yo quitaré toda enfermedad de en medio de ti.” Éxodo 23:25 (RVR)
Servir a Dios es demostrar lo agradecidos que estamos con Él. No te detengas de servir a Dios, no importa si lo que tienes en tus manos es poco o mucho, Él mira la actitud del corazón y no cuán perfectos o capacitados podamos estar. Puede que el enemigo intente detenerte haciéndote creer que no eres suficientemente bueno o que no posees los dones que otros tienen, pero ten la certeza de que fue Dios quien te escogió y te puso en el lugar donde estás. Servir a Dios es un privilegio, ya que de ésa manera somos parte de sus planes soberanos para la humildad.
Por Ruth Mamani
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.