A través de los años podemos ver cómo muchos hombres empezaron a sobresalir en el campo de la literatura y la poesía, algunos  formaban parte de ese entorno por tener una carrera dedicada a la psicología, filosofía o abogacía, pero otros desarrollaron esa habilidad por gusto y satisfacción personal.

De esa manera hoy conocemos los trabajos de una infinidad de pensadores de varios países del mundo. Muchos de ellos murieron, pero su legado literario será recordado siempre a través de sus escritos y también de los pequeños pensamientos que nos dejaron y que ingeniosamente encierran grandes lecciones de vida.

Algunas de esas frases animan, corrigen, enseñan o simplemente describen alguna situación de la vida, y son muy usadas en las redes sociales, en murales, libros, camisetas, dedicatorias en tarjetas de cumpleaños, aniversarios o salutaciones póstumas.

Muchos de esos pensamientos pueden llegar a tener un efecto tremendamente alentador, pero producen un impacto mayor cuando se conoce el lugar y el momento en el que fueron escritos.

Algunos autores tuvieron libertad y plenitud de vida cuando escribieron sus obras. Pero existen otros como por ejemplo Nelson Mandela quien estuvo prisionero durante 27 años en la isla Robben y después en las prisiones de Pollsmoor y de Víctor Verster. Muchas de sus frases célebres fueron pensadas y escritas en una celda donde era conocido como el prisionero 466/64.

Aunque todos sabemos que después salió en libertad y llegó a ser presidente de Sud África, siempre será recordado por la perseverancia que tuvo en la lucha por la libertad de su nación.

Filipenses 4:4 dice: “Alégrense siempre en el Señor. Repito: ¡Alégrense!” Versión Dios Habla Hoy

Todo el libro de Filipenses da la impresión de haber sido escrito al fuego de una reconfortante chimenea, con un fiel sabueso recostado en el tapete, una taza caliente de leche sobre el escritorio y un ventanal que permite la vista panorámica de una noche estrellada. Pero no fue así.

El apóstol Pablo en ese momento de su vida era ya un hombre mayor que estaba en una mazmorra húmeda y fría con los pies sujetos a un cepo esperando la llamada de su verdugo. La situación no parecía que iba a mejorar, pero aun así en todos los capítulos se pueden ver temas como la humildad, el gozo, la unidad y la vida cristiana sobresaliendo casi en forma natural.

A primera vista es imposible notar el lugar real en el que está escribiendo Pablo ya que no expresa la más mínima queja sobre su situación, pero aun así logra tener la paz que sobrepasa todo entendimiento y alcanza la inspiración divina para escribir una carta alentadora.

El Antiguo y el Nuevo Testamento están repletos de hombres que lograron impactar con sus vidas a miles de personas hasta el día de hoy, pero no podemos dejar de mencionar  sobre todo, las notas de amor que se pueden encontrar al leer el relato de la muerte de Jesús en La Cruz del Calvario.

La palabra de Dios no sólo es un compendio de frases alentadoras, sino que tienen el objetivo de llenar de fortaleza y brindar la paz que sobre pasa todo entendimiento a aquel que tiene fe.

“Cuando me hablabas, yo devoraba tus palabras; ellas eran la dicha y la alegría de mi corazón, porque yo te pertenezco, Señor y Dios todopoderoso.” Jeremías 15:16 Versión Dios Habla Hoy

 

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

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