Si visitas una tienda de máquinas para gastronomía podrás encontrar un equipo para cada cosa: para moler carne, hacer los fideos, hacer el pan,  etc. Cada máquina cumple su propia función. Eso llamó mucho mi atención ya que yo no sabía que existía una máquina especial para procesar cada alimento.

Eso me pone a pensar que cada uno de nosotros, formamos parte del cuerpo de Cristo y tenemos una función única, un don dado por Él. ”Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como él quiere.” 1 Corintios 12:11 (RVR-1960)

Ha sucedido que a veces llegamos a tener miramientos, envidias, competencia para lograr algo o porque la función que realices resalte sobre las que otras personas hacen.

Pero en realidad cada uno de nosotros estamos en este mundo para hacer algo diferente y en un lugar específico. Recuerda que cuando Dios te llama a cumplir tu misión nadie más está llamado para hacerlo pues Él desea usarte a ti para un tiempo y lugar,  para ser de bendición a personas específicas.

“Sigan por el camino que el Señor su Dios les ha trazado, para que vivan, prosperen y disfruten de larga vida en la tierra que van a poseer.” Deuteronomio 5:33 (NVI)

Muchas veces podemos perder la oportunidad de hablar con alguien porque pensamos que ya habrá otra que lo hará pero en realidad cuando Dios te llama por tu nombre nadie más puede responder, es Dios quien quiere usarte a ti y es ahí donde nuestra obediencia debe prevalecer.

“Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho.” 1 Corintios 12:7

No esperes que otra persona lo haga, hoy es el día en que debes responder a tu llamado y encontrar tu propósito.

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

Deja un comentario