Sabemos que el estrés tiene consecuencias en la salud mental y física de una persona, pero ¿qué de las relaciones interpersonales?
Aunque creamos que el estrés únicamente afecta al individuo, investigaciones por especialistas han demostrado que no es así: también tiene un efecto en la manera como interactuamos con otros. Es por tal motivo que es primordial que prestemos atención a nuestro bienestar, porque este se reflejará en nuestro entorno.
Las peores decisiones son las que se toman cuando estás bajo estrés. Un estudio publicado en Journal of Neuroscience confirmó que esto es cierto, y que puede crear problemas con los demás.
Dicha investigación sugiere que:
Bajo estrés, las personas sopesan más cada pieza de evidencia que respalda conclusiones indeseables que cuando están relajados. Por el contrario, la forma en que sopesan la evidencia que respalda las conclusiones deseables no se ve afectada por el estrés. Como resultado, es más probable que las personas lleguen a la conclusión de que lo peor es cierto cuando están estresadas.
Aunque este comportamiento puede ser bueno porque las creencias negativas pueden llevar a las personas a ser más cautelosas cuando se encuentran en entornos amenazantes; cuando se trata de relaciones personales puede resultar fatal, ya que no fomenta al diálogo sino al prejuicio.
Como consecuencia, el estrés hace que las relaciones se vean afectadas pues una persona estresada no hará preguntas, sino que sacará sus propias conclusiones negativas y pensará en el peor resultado.
La empatía es la habilidad de comprender emocionalmente lo que sienten las personas; es decir, «ponerse en los zapatos» del otro y entender sus sentimientos, por más que no pasemos por lo mismo. La empatía nos ayuda en las relaciones interpersonales porque solo así podemos formar lazos afectivos con los demás.
Una investigación demostró que cuando las personas están bajo estrés suelen mostrar respuestas menos empáticas hacia los demás, especialmente hacia quienes están más cerca, es decir, a sus parejas. Esto quizá se debe a que cuando estamos estresados no pensamos en nadie más que en nuestra fuente de preocupación. Como consecuencia, desquitamos nuestro estrés en nuestras relaciones interpersonales.
Debido a que la falta de empatía puede causar divisiones y conflictos, los expertos recomiendan fomentar actividades que ayuden a promover la empatía; ya sea con:
De esta manera, las personas que nos rodean no se sentirán atacados o excluidos cuando tenemos estrés.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.
¿Ver pornografía afecta mi relación amorosa? Contestamos esta pregunta a la luz de la Palabra…
Podemos sentirnos frustrados y molestos cuando las cosas no resultan como queríamos, pero un cambio…
A veces creemos que la felicidad está en vivir el momento, pero el gozo real…
Siendo que nuestros dones nos los dio, debemos usarlos para servirle, para servir a nuestro…
Conoce en este artículo los 5 errores más comunes al crear contenido cristiano de la…
Que el enojo no sea quien controle nuestro actuar, sino que sea el dominio propio…