“No estéis unidos en yugo desigual con los incrédulos, pues ¿qué asociación tienen la justicia y la iniquidad? ¿O qué comunión la luz con las tinieblas?” 2 Corintios 6:14  (LBLA)

El yugo es un artefacto de madera que se usa para que dos bueyes trabajen de manera coordinada y pareja en la preparación de la tierra antes de la siembra. El yugo permite que los bueyes hagan un esfuerzo parejo, pero si uno de ellos es mas débil, el otro buey hará el doble de esfuerzo por lo cual pudiera terminar lastimado. La Biblia dice:“¿Acaso pueden dos personas andar juntas si no están de acuerdo?” Amós 3:3  (NBV)

La Biblia hace esta analogía con el yugo que se les pone a los bueyes para que vayan derecho y ambos tengan un esfuerzo balanceado. La advertencia que muchas veces es ignorada o pasada por alto es que un cristiano no debe unirse con alguien que no ha entregado su vida a Jesús. Esto aplica para el noviazgo y por supuesto, con más razón para el matrimonio.  La desobediencia a esta advertencia suele traer dolorosas consecuencias como conflictos, divorcios y problemas en la educación de los hijos, entre otros. La Biblia dice que no puede haber comunión entre la luz y las tinieblas, por lo cual no hay manera de poner cimientos sólidos para edificar una familia, si no hay acuerdo en algo tan básico como son las propias creencias.

Recuerda, este no es un tema menor ni pasado de moda, sino que es un valioso consejo que nos da la Palabra de Dios para evitarnos dolor y sufrimiento. Por lo tanto, si quieres poner sólidos cimientos en una relación, edifícala sobre la Roca firme que es Jesucristo. Esto no debiera ser negociable.

Por Cristhian Castillo.

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Artículo producido para Radio Cristiana CVCLAVOZ.

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