No hay nada mejor que tener el respaldo de Dios en todo porque muchas veces se presentan situaciones en el diario vivir en las que no tenemos el control ni que dependen de esfuerzo sino de la gracia de Dios.

Nehemías, que era el copero de Artejerjes, rey de Persia, recibió la triste noticia que su ciudad, Jerusalén, se encontraba en gran mal y afrenta, su muro derribado y sus puertas quemadas. Entonces él oró a Dios con un corazón compungido antes de hablar con el rey y de hacer algo al respecto. Es así que recibió el respaldo de Dios delante de Artajerjes,  quien le dio permiso y también le ayudó con lo que necesitaba para reconstruir su pueblo.

Reconocer que no sólo depende de ti superar obstáculos o lograr metas sino de Dios te hace más sabio y fuerte. La oración de Nehemías fue profunda y terminó reconociendo que su éxito dependía del Señor: “Te ruego, oh Jehová, esté ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean reverenciar tu nombre; concede ahora buen éxito a tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey.” Nehemías 1:11

Busca la bendición de Dios, no vayas a la batalla desprotegido sino ármate con la gracia que sólo nuestro Creador puede darte. También te invito a fortalecerte de la Palabra de Dios porque ahí están registrados más testimonio de cómo Jehová respalda al que lo busca de corazón.

Antes de salir encomienda tu vida a Dios.

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Artículo producido para Radio Cristiana CVCLAVOZ.

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