Si eres una persona organizada estoy segura que tienes una agenda en la que se encuentra todo lo que tienes que realizar para este año. Por otro lado, aunque tengas problemas de organización y no portes un calendario marcado en este momento, seguramente ya tienes conciencia  de  dónde invertirás tu tiempo.

Cuando planificamos o pensamos en lo que va a ocupar nuestro tiempo, generalmente lo hacemos pensando sólo en nosotros, es decir: Lo que me gusta hacer, lo que quiero hacer y lo que es más importante para mí; olvidando que no nos encontramos solos.

“En esta vida todo tiene su momento; hay un tiempo para todo.” Eclesiastés 3:1 (TLA)

Tenemos en claro que todo tiene su tiempo, hay uno  para comer, divertirse, trabajar  y hasta uno de  esfuerzo pero, ¿Te has puesto a pensar si estás repartiendo bien tu tiempo?  Recuerda que tienes una familia, esposa e hijos, padres, hermanos que necesitan un abrazo, un tiempo contigo para sentirse queridos  y ver en ti el amor de Dios.

Del mismo modo sucede con un amigo que está deprimido, una persona en la cárcel que no tiene quién lo visite, alguien que está en el hospital y necesita palabras de aliento, aquel que necesita guía para conocer a Dios y tantas personas más que  necesitan que los tomes en cuenta.

“Nada es más fácil que estar ocupado, y nada más difícil que ser efectivo”

El tiempo es un tesoro valioso que una vez perdido no se puede recuperar, por lo tanto,  dedicarás mayor cantidad de esfuerzo a aquello que consideres importante.  Es fácil llenar tu agenda con todo lo que quieres y deseas hacer, sin embargo, sería bueno que te preguntes: ¿Será efectivo? ¿Agrado a Dios en mi forma de administrar el tiempo?

Hoy te animo a empezar tu día de una manera diferente, piensa primero en Dios y en prioridades, donde para empezar incluyas a tu familia, después amigos o personas que necesitan de ti en éste momento. Esfuérzate para que tu tiempo no se enfoque en solamente estar ocupado, sino en ser efectivo porque sólo así valdrá la pena vivirlo.

¡No estás solo! Piensa en los demás.

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

Deja un comentario