Había una mujer que tenía un esposo muy gruñón y oraba a Dios pidiendo que lo cambiara, que sea manso con ella. Pero nada pasaba, hasta que un día Dios habló a su corazón diciendo: “¿por qué no oras por tu esposo para que primero me conozca? Así yo transformaría su corazón. No busques sólo tu beneficio hija, busca la eternidad para él.”

Pasa muchas veces que procuramos sólo nuestro bienestar en nuestras acciones y oraciones, dejando de lado lo que realmente es importante: la voluntad de Dios y dentro de ella está el darle la honra en todo lo que hagamos.

“Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.” 1 Corintios 10:31 (RVR1960)

Si bien podemos hacer esto en la iglesia, donde todos los hermanos nos ven y aplauden, no debería ser diferente en nuestro lugar de trabajo, estudio u hogar, que es en donde mayormente reflejamos a Dios en nuestros actos y palabras.

Quizás tengas muchas peticiones que presentarle a Dios y anhelos que cumplir o sueños que alcanzar, te pregunto ¿Le dará la gloria al Señor si se cumple? Si es así debes estar tranquilo y perseverar, porque se hará.

Si no estás seguro, pues pídele a Dios que dirija tu corazón para que se alinee a su perfecta voluntad.

“No a nosotros, Señor, no a nosotros, Sino a tu nombre da Gloria, Por tu misericordia, por tu verdad.” Salmos 115:1

“Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.” Colosenses 3:17 (RVR1960)

Que tu motivación en todo lo que hagas y digas sea darle honor a nuestro Dios, para  que logres aquello que tienes planeado para tu vida.

¡Vivamos para darle gloria sólo a Él!

El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.

Deja un comentario