Por más duras que puedan ser las batallas que te tocan enfrentar, comienza a creer que no estás solo.
Hay cosas que no podemos controlar, que están fuera de nuestro alcance, entonces, ¿Por qué no confiárselas a Dios?.
El tiempo todo lo cambia, pero debemos trabajar por nuestras relaciones.
El evangelio es social. La persona que reconoce a Jesús como Redentor no se queda creyendo en un vacío existencial…
Cuando necesitamos ayuda buscamos primero a las personas en las que más confiamos. ¿A quién acudes primero?
Cuando somos niños, todo el mundo se abre ante uno. Nada nos parece ilícito de preguntar. Nada nos parece vedado…
Las circunstancias difíciles que se viven en el mundo pueden llevarnos a desfallecer, pero Dios tiene una promesa para nosotros…
Todos tenemos un lugar especial donde queremos acudir frecuentemente, ¿Cuál es el tuyo?
Todos tenemos experiencias dolorosas que nos cuestan sobrellevar, si se trata de perdonar a alguien ¿Estarías dispuesto a hacerlo?