Las lunas de sangre son un fenómeno que hemos escuchado en estos tiempos.

Pocas veces las Escrituras, la ciencia y la historia se alinean en una misma dirección.

Sin embargo, las últimas tres series de Cuatro Lunas de Sangre han hecho, justamente, eso.

Existe un libro  de John Hagee, que se encarga de explorar esta conexión sobrenatural de algunos sucesos celestiales, junto a la profecía bíblica y el futuro del pueblo escogido de Dios, y las naciones del mundo.

“Habrá señales en el sol, la luna y las estrellas… Cuando comiencen a suceder estas cosas, cobren ánimo y levanten la cabeza, porque  se acerca su redención”. Lucas 21:25-28

Las cuatro lunas de sangre de 1492:

Las cuatro lunas de sangre de 1492 anunciaron el Edicto de Expulsión en el que se les dio a los judíos 14 días para dejar España para siempre. Una angustia creciente para quienes habían visto a sus amigos torturados en el potro y quemados en la hoguera por negarse a convertirse al catolicismo durante la Inquisición española. Pero pronto sus lágrimas acabaron en un triunfo. Ese mes de octubre, Cristóbal Colón, financiado con dinero judío y mapas, encontró un refugio para los judíos del mundo entero: América.

Las cuatro lunas de sangre de 1948:

Después de la indescriptible angustia del holocausto las cuatro lunas de sangre de 1948 fueron el portal de apertura del triunfante nacimiento del estado de Israel. Después de casi 2000 años de diáspora Dios reunió a los judíos exiliados de las naciones del mundo y los trajo a su hogar, a la tierra del pacto que habían profetizado los profetas del Antiguo Testamento. Dios nos envió una señal de que la historia estaba a punto de cambiar para siempre…y así fue.

Las cuatro lunas de sangre de 1967:

Las cuatro lunas de sangre de 1967 ocurrieron durante la Guerra de los Seis Días en que se ganó Jerusalén para anexarla al estado de Israel. Hoy Jerusalén es más que la “capital indivisible” del país. Allí fue crucificado Jesús por los pecados del mundo y allí volverá Él para gobernar un reino global que no acabará jamás. Este hecho nos muestra que la historia cambió para siempre. Dios envió la revelación en cuatro lunas de sangre.

Las cuatro lunas de sangre de 2014:

Las siguientes cuatro lunas de sangre comenzaron en abril de 2014 y terminan en septiembre de 2015. ¡La historia está a punto de cambiar para siempre! ¿Estamos preparados?

En el cielo y en la tierra mostraré prodigios: sangre, fuego y columnas de humo. El sol se convertirá en tinieblas y la luna en sangre antes que llegue el día del Señor, día grande y terrible. —Joel 2:30-31

Al conocer lo que esta sucediendo en estos tiempos, queda en nosotros creer o no creer. Pero lo mas importante es que podamos saber que SIEMPRE que Dios ha dicho algo, lo ha cumplido. Y siempre que Dios ha mostrado algo a su pueblo fue con un propósito. ¿Qué crees tu?

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