Hoy me decidí a escribir estas palabras.
Veo con mucha preocupación el afán de muchas jóvenes a llamar la atención de hombres con palabras envueltas en “cristianismo”, las fotos de algunas personas “tímidas”que no dejan en sí, mucho de esa palabra.
NO estoy en contra de que quieran mostrarse bellas, llamativas o como le quieran llamar, lo que realmente me preocupa es que estamos, y seguimos en un patrón anormal de comportamiento en el que hay un desborde de necesidad de afecto impresionante y una necesidad de llamar la atención que alarma. Y si bien es cierto que todas hemos pasado por lo mismo, también es cierto que NO toda la gente tiene que saber o ver, que mostrando partes de nuestro cuerpo como las piernas, nuestro torso, los senos, entre otras; vamos a conseguir algo, porque de hecho lo que se logra es el efecto contrario.
El efecto que pone a la gente a pensar: bueno y ella no que era tímida, penosa, discreta e introvertida? y las fotos y comentarios muestran algo completamente diferente?
Aquí el punto NO es JUZGAR, el punto es que empecemos por aceptarnos y mostrarnos tal como somos, para así realmente conseguir lo que anhelamos.
TODAS tenemos derecho a conseguir una pareja real y ser felices, pero la provocación pasiva, es muy fea y mas si viene de mujeres que de una u otra forma son una influencia para otros.
El tema es que nuestra imagen coincida con quien decimos ser, y que no nos aprovechemos de fotos para publicar mensajes “de Dios” en imágenes que muestran nuestro cuerpo de formas seductoras o atrayentes, eso NO coincide de ninguna manera posible con algo que Dios diría.
Y finalizo con esto: Bueno, yo solo digo, que debemos pensar mejor… ¿Será que los hombres también se ponen en esas?
Pensemos mejor, nosotros también podemos cambiar las tendencias.
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.