“Por lo demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido.” Efesios 5:33 (RVR1960).

Muchos comparan al amor que existe entre dos personas con una plantita que necesita cuidados y riego diario, la razón es sencilla, el amor debe alimentarse; cultivamos amor cuando vamos descubriendo más características del cónyuge, admirando sus cualidades y apoyándolo para que pueda sobrellevar sus debilidades.

Consideremos esta clara instrucción del apóstol Pablo, para hacer que el amor y el respeto crezcan, no sólo en el matrimonio sino también en el hogar.

Por Cesia Serna

 

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Artículo producido para Radio Cristiana CVCLAVOZ.

Deja un comentario