“Él guiará los pasos de sus fieles, pero los malvados se perderán entre las sombras. ¡Nadie triunfa por sus propias fuerzas!” 1 Samuel 2:9 (NVI)

Resulta muy fácil enorgullecernos por nuestros logros lo cual puede llevarnos a sentirnos autosuficientes. Debemos recordar que cada éxito se lo debemos a Dios. Nadie alcanza sus metas por sí solo, ya que en todo necesitamos de la ayuda del Señor. Por lo tanto, entrega todas tus metas a Dios y pídele que sea El guiándote en los pasos que vayas a dar.

Por Yahany Chávez

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

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