“Despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante.” Hebreos 12:1
Cuántas veces hemos sido heridos, lastimados, traicionados, culpados de injusticias, lo cual nos ha llevado a encerrarnos en nosotros mismos para no sufrir. Pero lamentablemente eso en lugar de ser una solución nos hace sufrir, sangrando por dentro y por fuera, ya que este resentimiento tiene consecuencias que nos afectan en lo físico, en lo mental y espiritual. Esta noche Dios anhela que deposites todo ese peso en sus manos, entrégale a Dios toda carga y permite que te sane, restaure y libere de toda amargura y mal sentimiento de tu corazón. Pero también haz tu parte, toma la decisión de perdonar. Por Danitza Luna
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.