Completamente llenos de alegría y paz

Es maravilloso vivir así, completamente llenos de alegría y paz. Pero es muy cierto que los sucesos de la vida pueden interferir en ese estado de ánimo. Sin embargo, nos podemos proponer recordarnos constantemente confiar en el Señor para lograrlo.

Y es porque sabemos de Su gran poder, conocemos Sus obras y escuchamos a diario de Sus milagros. Nuestro Dios sigue haciendo milagros, es un Dios vivo y activo y por eso, debemos vivir completamente llenos de alegría y paz.

Le pido a Dios, fuente de esperanza, que los llene completamente de alegría y paz, porque confían en él. Entonces rebosarán de una esperanza segura mediante el poder del Espíritu Santo. Romanos 15:13 (NTV)

Dios debe ser la fuente en la que cargamos nuestras baterías espirituales cada día. Es nuestra ayuda constante, podemos contar con Él en todo momento. Podemos vivir completamente llenos de alegría y paz y contagiar a otros de lo mismo.

Y tal vez me digas que para ti es imposible. Te lo creo. Hay circunstancias que no nos permiten estar alegres y llenos de paz todo el día. Pero si nos esforzamos por buscar el lado positivo a todo y entendemos que amargarnos, angustiarnos o estresarnos no soluciona nada, tal vez lo logremos.

Confiando en Dios y conociéndolo será posible vivir en alegría y paz

Una vez más te explico que no es que al tener a Dios en nuestra vida no tendremos problemas, pero si te enfocas en el tamaño del Señor y Su gran poder, te debe relajar saber que Él está de tu parte, aboga por ti y te saca delante de cualquier cosa que puedas estar enfrentando.

A Dios le place que seamos felices y vivamos llenos de alegría y paz, por eso nos dejó esa guía magnífica que es la Biblia, para que aprendamos a vivir así, con alegría y paz. Él nos indica la manera de no preocuparnos o estresarnos sabiendo que Dios es más poderoso que cualquier cosa de este mundo.

Es la razón por la que necesitamos tener una relación estrecha con Él. Mientras más nos acercamos a Dios y más lo conocemos, viviremos más confiados en Su amor, Su protección, Su guía y Su voluntad, que siempre es buena para nosotros.

Al fortalecer nuestra fe, fortalecemos nuestra confianza en Él. Dios nunca nos defraudará. No va a hacer todo lo que le pidamos, no nos va a complacer con todas nuestras demandas y deseos, pero sí nos dará lo mejor para nosotros si estamos en contacto diario con Él.

Oración del día

Bendito y amado Dios, gracias por darme la posibilidad de vivir con alegría y paz, sabiendo que puedo confiar en Tu protección, amor y poder. Que siempre estás ahí para mí y que debo procurar fortalecer mi  relación contigo. 

Ayúdame a hacerte prioridad, leyendo tu Palabra a diario, buscándote en oración y así, conociéndote más y haciéndome más firme en la fe. Gracias mi Señor. Todo esto, en el nombre poderoso de Jesús, y digo amén.