“Porque el amor al dinero es la raíz de toda clase de males. Por codiciarlo, algunos se han desviado de la fe y se han causado muchísimos sinsabores.” 1 Timoteo 6:10 (NTV).

Dios provee las bendiciones materiales para cubrir nuestras necesidades, pero cuando caemos en el amor al dinero que es la raíz de todos los males, estamos gobernados por un deseo que nos hace pensar y actuar sólo en función del enriquecimiento o del materialismo. De tal manera, nos alegramos cuando nuestras cuentas bancarias crecen, pero reaccionamos con tristeza cuando debemos atravesar tiempo de escasez.  Al parecer, lo material puede influir a tal punto en nuestras decisiones que segados por este amor, nos hace capaces de romper relaciones importantes, abandonar a nuestra familia, descuidar la salud, no tener amigos, etc. Lo cual nos convierte en esclavos de nuestros deseos que poco a poco nos va destruyendo.

Cuando el amor al dinero entra en el  corazón, la fe se aleja. Los afanes por conseguir más ¿te están alejando de tus seres queridos? ¿Te están alejando de Dios?

Por Giovana Aleman

 

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

Deja un comentario