“Cuando te acuestes, no tendrás temor, sino que te acostarás, y tu sueño será grato” Proverbios 3:24
¿Hace cuánto tiempo no tienes sueños dulces y tranquilos? Quizás los afanes, problemas y diversas situaciones te provocan pesadillas y cuando despiertas tienes la misma sensación que cuando dormías. Dios puede cambiar esa pesadilla en un sueño reparador, sólo necesitas dejar en sus manos tus problemas y necesidades.
Por Judith Quisbert
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.