Yo, por mi parte, los consolaré a ustedes, como una madre consuela a su hijo. Así ustedes recibirán consuelo en la ciudad de Jerusalén.  Isaías 66:13 (TLA)

Nada en este mundo se compara al amor de una madre, siempre está dispuesta a perdonar los errores de sus hijos, a luchar contra viento y marea si es que alguno estuviera en problemas. Si como madres o hijos somos capaces de dar y recibir amor, ¿te imaginas experimentar el amor sobrenatural de Dios? No importa por lo que estés atravesando hoy, Dios quiere tomarte en sus brazos para consolar tu corazón y llenarte con su paz que sobrepasa todo entendimiento.

Por Ruth Mamani

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

Deja un comentario