“Le pedí a Dios que me ayudará, y su respuesta fue positiva: ¡me libró del miedo que tenía!” Salmos 34:4 (TLA)

El temor es un arma poderosa que tú mismo entregas en las manos del enemigo y te va destruyendo lentamente. Haciendo que dudes de si Dios puede y quiere restaurar tu vida, ya sea en lo familiar, económico o en el área que tu necesites, con un toque de la mano de Dios. Hay problemas que para ti no tienen solución o simplemente no la puedes ver y esto se debe a que el temor se ha apoderado de ti, impidiéndote ver más allá de las circunstancias. Por lo tanto, en esta noche y antes de acostarte pide ayuda a tu Padre para ser libre del temor y tus ojos de la fe puedan ser abiertos nuevamente. El secreto está en buscar a aquél que nos puede hacer libres. Antes de acostarte te invito a que pidas ayuda del Padre,  Él te responderá y te librara del temor restaurando tu fe para que creas una vez más. ¡El secreto está en acercarse y pedir! Por  Miguel Ángel Veizaga.

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

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