“Por eso, hermanos, en medio de todas nuestras angustias y sufrimientos ustedes nos han dado ánimo por su fe”. 1 Tesalonicenses 3:7 (NVI)

Muchas veces hemos querido que otros oren por nosotros en todos nuestros desconsuelos para fortalecernos y que nuestra sea renovada. Hoy te animo a que ores por tu prójimo ya que muchos de ellos pudieran estar pasando situaciones más difíciles que las tuyas. No te quedes pensando solo en lo que te pasa a ti, sino determínate a ser una persona que aún en medio de las angustias es capaz de animar a otros. Recuerda que se conocerá que realmente eres un hijo de Dios por el amor que tienes por los demás.

Por Miguel Ángel Veizaga

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

Deja un comentario