Andrés,
Me da pena comentarte esto, pero necesito un consejo. No hemos sido sabios con nuestro dinero y hemos acudido a mis suegros por ayuda. Ahora siento que estoy casado con mi esposa y mi suegra porque en todo quiere estar. ¿Qué puedo hacer?
Paco
Greensboro, NC
Hola Paco,
Los pleitos económicos son una de las causas principales del divorcio; pero, si aparte le agregas dinamita que es el factor “suegra”, ¡PUUUM!Es obvio que la falta de orden los llevó a este punto, pero si no hacen cambios inmediatos, esto puede acabar con su matrimonio y con ustedes también. Hay dos cosas que deben hacer para cambiar de rumbo y proteger su matrimonio.
Unidad – Necesitan sentarse a conversar y dejar bien claro que ustedes son lo que más importa y que están dispuestos a pelear y hasta a sacrificarse por su matrimonio. Es increíble lo que sucede cuando un matrimonio se toma de la mano y ambos, juntos, empiezan a jalar en la misma dirección. Empiecen por hacer un presupuesto donde los dos opinan y llegan a un acuerdo de cómo se van a gastar el dinero que generan como matrimonio. (Algunos no pasan de aquí debido a su inmadurez, pero la mayoría no lo logra por ignorancia y pereza). Empápense de este tipo de información y verán que no es tan complicado aplicar el conocimiento para hacer que el dinero se comporte.
Límites – Dice un dicho que el tener cercas nos hace mejores vecinos. Las cercas o lo límites le dicen a una persona, “no te pases”. Le voy a dar el beneficio de la duda a tu suegra, y voy a pensar que ella no es metiche; pero estoy seguro que ella ve cómo el desorden financiero en sus vidas los está afectando y le duele porque al fin y al cabo tu esposa es su hija. Cuando le pidieron dinero a tu suegra, abrieron la puerta para que ella entrara, se pasara del límite y empezara a dar su opinión; yo entiendo que ustedes solo querían resolver un problema monetario… El sabio Salomón escribió en Proverbios: “el deudor es esclavo del acreedor”. Lo que significa que tu suegra cree tener (y en cierto modo lo tiene), un derecho sobre ustedes.
Hagan un presupuesto e incluyan en él un plan de pagos para lo que le debes a tu suegra. Déjenle saber a ella que tienen un plan para pagarle lo antes posible. Si ella les ofreciera que no lo hagan, les recomiendo que, de todas maneras, le paguen a fin de mantener la relación como suegra y no como con un banquero a quien le quedaron mal.
Yo sé que con peleas no han resuelto nada. La disciplina no es fácil, pero es el camino seguro a la libertad financiera. Esto no es tan complicado, se necesita matemática básica para preparar un presupuesto. Lo más difícil es apagar la televisión o hacer a un lado los teléfonos. Con lápiz y papel en mano, tracen un plan para echar a la suegra metiche e invitar a la familia a la dulce y sabia abuela de tus hijos. ¡Es hora de salir de esto de una vez!
Andrés