Un niño se cayó de la cama y cuando su mamá le preguntó lo que había sucedido contestó: “No lo sé, supongo que me quedé demasiado cerca del sitio por donde entré”.

Esta ilustración la podemos aplicar a diferentes áreas de nuestra vida, en las cuales nosotros decidimos quedarnos al margen de todo lo que se relacionaba a ellas y obtenemos un resultado distinto al que esperábamos. Tal vez algunas actitudes influyeron en nuestra decisión pero nadie nos obligó a permanecer aislados, fuimos nosotros los que nos distanciamos.

Resulta tentador quedarnos en el sitio por el cual entramos y nunca movernos de ese lugar pero Dios no quiere que seamos simples espectadores de lo que sucede a nuestro alrededor, sino que nos convirtamos en agentes de cambio para ser portadores de su amor, esperanza, paz, fe, perdón y unión.

“Desháganse de su vieja naturaleza pecaminosa y de su antigua manera de vivir, que está corrompida por la sensualidad y el engaño. En cambio, dejen que el Espíritu les renueve los pensamientos y las actitudes. Pónganse la nueva naturaleza, creada para ser a la semejanza de Dios, quien es verdaderamente justo y santo. Así que dejen de decir mentiras. Digamos siempre la verdad a todos porque nosotros somos miembros de un mismo cuerpo.” Efesios 4:22-25 (NTV)

Posiblemente estás disconforme con tu matrimonio, familia, iglesia, lugar de estudio o trabajo, etc. No te quedes de brazos cruzados sin hacer nada o sólo juzgando, haz todo lo que esté a tu alcance para cambiar ese ambiente porque tendrás el respaldo de Dios al dejar de enfocarte en los errores de los demás y corregir los tuyos. No esperes que otros cambien, empieza haciéndolo tú, reconoce que necesitas la ayuda del Espíritu Santo para amar y aceptar a los demás tal y como son, en vez de criticarlos y rechazarlos.

No cometas el mismo error del niño, no te quedes demasiado cerca del sitio por donde entraste porque es arriesgado permanecer en ese lugar.

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

Deja un comentario