“Él fortalece al cansado y acrecienta las fuerzas del débil.” Isaías 40:29
Creí que mi Navidad pasaría sin tener a mi familia unida, por tal motivo no hicimos ningún preparativo especial. Inicie el mes agradeciendo a Dios por la vida de mis seres queridos, por todo lo que me dio y reconocí que aunque la Navidad no fuera como la deseaba, debía estar agradecida porque Dios ha sido bueno conmigo. Llego el gran día y a horas de ese momento, mis sobrinos se quedaron junto a mi familia, los llevamos a pasear y al regresar, alguien nos envió la cena navideña para toda mi familia, mi hermana llegó de su viaje. En un momento el deseo de mi corazón se había hecho realidad. Por lo tanto, si hoy te encuentras desanimado y sin fuerzas, dudando de si Dios obrará en tu favor, te animo a que sigas creyendo porque Él es Todopoderoso, que hace cosas aún cuando no hay nada. Él muchas veces obra en silencio, pero cuando vemos su bendición, esta excede nuestras expectativas.
Por Danitza Luna
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.