Muchos lo llaman paranoia, otros, delirio de persecución pero la verdad es que muchas personas viven atemorizadas por enemigos de humo. Tal vez sea hora de dejar de vivir amedrentados por cosas que ni siquiera ocurrirán.
Podemos recordar la historia en la que Jacob quien usurpó la identidad de su hermano para recibir la bendición de su Padre, después huyó de su casa y fue perseguido por su hermano durante mucho tiempo. Jacob incluso le enviaba regalos a Esaú para que éste no lo matara.
Jacob creía que su hermano estaba lleno de rencor, odio, con ansias de venganza. Vivía y dormía atemorizado por algo que él creía que sucedería encuanto lo encontrara Esaú, y más aún cuando le dijeron que éste estaba llegando acompañado de 400 hombres.
Esto puede compararse con nuestras relaciones con otras áreas como la familia, los amigos, negocios, trabajo, la salud, etc. Estamos atemorizados por lo que puede salir mal o pasar, esto es porque no están en nuestro control y creemos siempre lo peor.
Pero, ¿Qué sucedió cuando Esaú encontró a Jacob? Todo lo que él pensaba que pasaría, no sucedió. Al contrario la Biblia nos cuenta lo que aconteció: “¿Y qué eran todos esos rebaños y esas manadas que encontré en el camino? preguntó Esaú. Son un regalo, mi señor, para asegurar tu amistad contestó Jacob. Hermano mío, yo tengo más que suficiente dijo Esaú. Guarda para ti lo que tienes. No insistió Jacob, si he logrado tu favor, te ruego que aceptes este regalo de mi parte. ¡Y qué alivio es ver tu amigable sonrisa! ¡Es como ver el rostro de Dios!” Génesis 33:8-10 (NTV)
Podemos ver que ese temor era en vano, su hermano lo estaba buscando porque lo quería de regreso, no le guardaba rencor y lo había perdonado.
Dejemos de vivir llenos de temor, creyendo cosas que no son reales, vivamos confiando en que Dios está en control, que nuestro Padre tiene misericordia si sabemos reconocer nuestras fallas.
Aparta de ti todo miedo y todo pensamiento negativo que hace que no puedas descansar tranquilo o que puedas vivir plenamente como Dios quiere.
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.