“Él entonces, respondiendo, le dijo: Señor, déjala todavía este año, hasta que yo cave alrededor de ella, y la abone. Y si diere fruto, bien; y si no, la cortarás después”. Lucas 13: 8-9 (RVR1960)
Muchas veces como creyentes somos alimentados y cuidados con gran esmero, pero a pesar de eso todavía no pueden distinguirse nuestros frutos. Hoy el Señor te da una nueva oportunidad para levantarte, trabajar y ser fructífero. Deja de lado la comodidad y pasividad y decídete a poner tus manos en el arado. Hay muchas cosas para hacer en la obra del Señor. ¡Dios quiere ver tus frutos!
Por Miguel Ángel Veizaga
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.