“Entonces uno de ellos, viendo que habĂ­a sido sanado, volviĂł, glorificando a Dios a gran voz, y se postrĂł rostro en tierra a sus pies, dĂĄndole gracias; y Ă©ste era samaritano”. Lucas 17:15-16

Todos recibimos dádivas de parte de Dios y muchos le mostramos indiferencia e ingratitud o simplemente nos vamos contentos con lo que recibimos. Hoy te pido que vengas ante su presencia con la misma actitud de este hombre que recibió un milagro en su vida; glorifícalo y póstrate ante Él agradeciendo por lo que hace cada día por ti.

Por Miguel Ángel Veizaga

 

El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

Deja un comentario