“Mi corazón está confiado en ti, oh Dios; mi corazón tiene confianza. ¡Con razón puedo cantar tus alabanzas!” Salmos 57:7 (NTV)
Cuando las personas te fallan y te lastiman, la confianza que tenías en ellos puede debilitarse e incluso desaparecer, debemos estar conscientes que el hombre es falible. Sólo hay un ser que jamás nos fallará “Dios” que es digno de confianza ciega porque no falla, ni retrocede, si dejamos todo en sus manos podemos vivir seguros y con gozo.
Por Judith Quisbert
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.