“Esta fue la ruta que Dios me dio, es un camino que me ha generado muchas ilusiones, muchas alegrías y ganas de construir vida, una pasión muy grande de llevar la Palabra del Señor por todos lados. Hay capítulos de entregarle el dolor a Dios y aceptar su voluntad…”
¿Por qué escribir un libro? Escribir no es fácil.
Sí, es difícil. Todo nace cuando fallece mi esposo Fernando. Muchas personas, entre ellos el Pastor Darío y Mary Tamayo de Expolit, me dijeron que lo escribiera. Yo pensaba, ¿un libro?, no estaba en mis planes. Un día orando le dije Señor: un libro, inmediatamente me trajo a la memoria, que Fernando tres años antes de fallecer me dijo: “Dios me dijo que escribiera un libro, un devocional específicamente sobre el temor”. Ahora lo vas a escribir tú en homenaje a él. Miré en su computadora si él tenía algo adelantado, no había escrito como tal, pero sí había hecho un trabajo de búsqueda de versículos, escudriñar la Biblia que es de las cosas más difíciles cuando hay un tema específico. Siento que es un trabajo en equipo entre mi esposo y yo. Le estoy poniendo el toque de lo que hago hace 20 años en CVCLAVOZ, un programa que se llama Pildoritas y Reflexiones.
¿Cuándo estará listo?
La idea es que esté listo a finales de este año para publicarlo en 2018. Se va a imprimir en español para toda América Latina, CVCLAVOZ es un ministerio satelital que llega más de 560 estaciones afiliadas. Nos escuchan a través de internet y en diferentes aplicaciones. La gente va a tener en sus manos algo con el nombre del programa, con historias de Fernando, prédicas que dio, vivencias mías, personajes bíblicos, etc. Dios le ha dado unos toques muy lindos, va a tocar mucho el corazón de hombres y mujeres.
¿Además del homenaje al Pastor Fernando, ¿qué es lo nuevo que vamos a leer en este libro?
Está todo, la parte cuando yo tuve la oportunidad de estar en Casa Sobre la Roca Orlando con el ministerio de mujeres, mamás solteras, personas con discapacidad. Ahora puedo llegar a otro público, el que ha tenido pérdidas tan fuertes como la pareja, los padres, un hijo. Es ver a Dios obrar cuando dispones el corazón para que lo sane, porque el dolor es tan fuerte que se queda uno sin piso. Esta fue una ruta que Dios me dio. Es un camino que me ha generado ilusión, alegría, ganas de continuar. Tengo una pasión muy grande, llevar la Palabra del Señor, me llena de vida y será un gran homenaje a Fernando.
¿Todo eso está contado en el libro?
Todo, hay capítulos de entregarle el dolor a Dios y aceptar su voluntad; creo que esa es la parte más difícil. Fernando tenía muchos testimonios de salud, diagnósticos de muerte por muchos años, todos pensamos que iba a salir de esa y cuando fallece, tuve que mirar a Dios y decirle si esa es tu voluntad la acepto, con dolor, con la ausencia, con la soledad.
¿Cómo ha afrontado la viudez?
Nunca pensé ser viuda, pero quiero servirle a Dios, llevar su Palabra de esperanza a tantas personas que se quedan en el dolor, no pueden ver hacia adelante. Hoy estoy sonriendo, en paz; no es una máscara, el Señor ha sanado mi corazón. Se está abriendo una nueva página con este libro, normalmente con CVCLAVOZ cuando estaba casada no viajaba mucho con ellos, no era fácil dejarlo en silla de ruedas solito, pero ahora sí, estuve en Perú, México, este año voy a Honduras, a Argentina que son todas estaciones donde se escucha CVCLAVOZ . Fue muy duro aprender a vivir sola porque Fernando y yo teníamos un matrimonio muy lindo, un amor tan grande que Dios nos permitió compartir, pero tenía dos opciones: quedarme frustrada, enojada, triste por su pérdida o agradecida con Dios por los años que me dio y compartir con un siervo de Dios que vivía lo que predicaba, fue un honor ser su esposa y cuidarlo.
Entrevista originalmente publicada en la revista Hechos & Crónicas.