Cuando escuchas la palabra «adicción», ¿qué es lo primero que imaginas? Tal vez sea la imagen de un drogadicto; sin embargo, puedes la adicción no es únicamente a las drogas: puedes ser adicto a algo y aún no te das cuenta.
Las personas que tienen dependencia de algo en particular suelen negar que su adicción es un problema, pero hay muchas maneras en las que uno puede convertirse en esclavo que no necesariamente está fuera de la ley. Por ejemplo, puede que no seas drogadicto ni hayas robado nada, pero puedes tener una adicción por estar en tu celular, ver televisión, a la comida, a las redes sociales, entre otros.
Si eres adicto a algo y no te has dado cuenta, la buena noticia es que siempre hay esperanza para quienes quieren superar los obstáculos en la vida. Lo primero que debes hacer es darte cuenta qué áreas de tu vida te están atando y cómo afecta tu relación con los demás. Luego, acude a Dios en oración; y rodéate de personas que tengan experiencia tratando esta área.
6 señales de que demuestran que eres adicto a algo
1. Consideras que es una prioridad
El tiempo que uno le dedica a algo es igual al grado de importancia que tiene. Tener un pasatiempo o ser apasionado respecto a un tema, es muy diferente a ser adicto. La adicción convierte algo importante en una obsesión y lo coloca como prioridad sobre todo lo demás.
Te darás cuenta que eres adicto a algo cuando esa práctica sea lo único que quieres hacer. Puede que realices tus actividades diarias; pero tu mente estará enfocada en otra cosa. Incluso puedes llegar a sacar tiempo o esconderte para practicar aquello que te causa adicción.
2. Te produce sensación de bienestar
No todas las cosas que nos producen bienestar son adicciones; sin embargo, las que sí son, tienden a provocar placer irreemplazable que crea una especie de necesidad de la cual es difícil desligarse. Esto hace que tengas una necesidad de más y más, y conforme pasa el tiempo, ya no sientes satisfacción.
Por ejemplo, las personas adictas a la pornografía van escalando en su gusto por imágenes cada vez más violentas y extremas; y esto es porque ya no sienten placer con videos normales.
3. Pierdes el control del tiempo
Las adicciones hacen que pierdas más tiempo de lo planeado y que uses frecuentemente la frase «solo un poco más». Por ejemplo, hay personas que se han vuelto adictas a las redes sociales y no dejan de revisarlas, incluso en medio de la noche. Sin embargo, no se dan cuenta que la mayor parte de su día se va en esa adicción.
Cuando eres adicto a algo comienzas a descuidar otras áreas de la vida; y si no te has fijado, pregúntale a alguien que viva contigo o sea cercano, y que pueda decirte si es verdad.
4. No puedes desligarte
¿Crees que no eres adicto a algo? Entonces deja de hacer lo que te gusta por un tiempo. Si no lo logras, entonces es muy probable que tengas un problema de adicción. Cuando eres dependiente no puedes dejar algo con facilidad es porque ya se ha adueñado de tu vida.
Si tienes este problema, consulta con un especialista que te ayude a descubrir la raíz del problema.
5. Afecta tus relaciones personales
Muchas veces, los demás notan las señales de adicción antes que nosotros. Si alguien te ha advertido sobre esto, entonces es un indicio de que debes evaluar tu vida, pues las adicciones destruyen relaciones conforme cobran relevancia.
Cuando alguien te diga que se siente que le dejaste de lado por hacer otra actividad, y que le das más importancia a esa práctica, podría ser una señal de adicción.
6. Evita que salgas adelante
Una adicción te limita porque no te deja crecer. Te dará cuenta de que algo se ha convertido en una adicción cuando te impida salir adelante en diferentes áreas de tu vida.
Si intentaste hacer cambios en tu vida pero no logras dejar atrás algo en concreto, entonces es un indicador de que eres dependiente de algo.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.