Muchas personas aún tienen dudas en cuanto a la existencia de Dios, a las promesas de Jesús de vida eterna e incluso acerca de la resurrección. Evidentemente a muchos les cuesta creer en lo que no han visto.
Sin embargo, no tienen que “creer” para estar seguros que el sol saldrá al día siguiente en la mañana. No les cuesta creer que lo que dice en los libros de historia de su país es verdad aunque no estuvieron ahí.
Entonces ¿porqué les cuesta creer en ese maravilloso libro de historia que es la Biblia?
Yo les pregunto: ¿Qué tal si es verdad? ¿Qué tal si es cierto todo lo que dice la Biblia, y lo vienes a saber después que ya moriste? ¿No te parece mejor asegurar que al irte de este mundo vas a ser recibido por los brazos de un Dios amoroso?
Otra pregunta: ¿Qué explicación me puedes dar al hecho de que un carpintero en un lugar totalmente inhóspito, al otro lado del mundo, rechazado por tantos, haya logrado el impacto que ha tenido Jesús, aún antes de las comunicaciones asombrosas que tenemos hoy día?
Yo te digo algo, yo prefiero creer, aferrarme a la esperanza maravillosa que nos da ese Dios creador de todo lo existente, al que hasta Einstein, el científico reconoce. Yo prefiero decirle a todos los que no conocen a Jesús, que Él es la verdad, Él es el amor y que Él; quien siempre ha cumplido las promesas que hizo en la Biblia, nos ha prometido tener vida eterna junto a Él con tan solo creer en Su existencia.
Te invito a que tomes unos minutos a solas y le pidas a Dios que perdone tu incredulidad y que entre en tu vida, que la rija y se haga Su voluntad en ella. ¡Él nos ama tanto! Nos ama tal como somos y en el lugar que estamos. Sabemos que hemos hecho mal y posiblemente seguiremos equivocándonos, pero Él nos ayuda a fortalecernos para no caer más en acciones con las que luego nos sentimos mal. Hacerlo te va a dar una paz, una tranquilidad que no te vas a explicar. Por otra parte, qué rico saber que tenemos un propósito. Él te lo dará a conocer.
Déjame saber si te decidiste a tener ese encuentro con Jesús. Escríbeme a [email protected]
Este artículo fue producido para Radio Cristiana CVCLAVOZ.