3 cosas que aprendí en 3 años de matrimonio

3 cosas que aprendí en 3 años de matrimonio

El 14 de Marzo cumplo tres años de casada y me parece mentira que en tan corto tiempo se pueda aprender tanto, comparado con matrimonios de 10, 20 años y más. Siento que he crecido, mejorado y cambiado en muchas áreas pero quiero enfocarme en las que más me han hecho crecer como mujer y como esposa.

La comunicación: Es irónico que siendo graduada en comunicación social y presentadora de un morning show tenga problemas comunicándome o hablando, pero sí, esa era mi realidad. El matrimonio básicamente me obligó a hablar y a entender que mi esposo no tiene poderes de adivinar o de leer mi mente y que debo vocalizar mis ideas, planes, pensamientos y las cosas en las que necesito su ayuda. He mejorado mucho sobre todo en las peleas, (y sí peleamos y es cien por ciento normal). En esos momentos de crisis en que las cosas no van bien, aprendí a dejar la rabia a un lado y no encerrarme en mi enojo. Aprendí a expresar mis sentimientos, lo que me incomodó o molestó de una situación o conversación. Eso por una parte y la otra parte es que aprendí a expresarlos de manera correcta, porque hay que saber cómo decir las cosas en una discusión para no ofender a tu pareja; por ejemplo, esperar unos minutos a que se bajen los ánimos, hablar calmados y escuchar con atención. Te puedo asegurar que no hacía nada de esto antes de estar casada.

El perdonar: De chiquitos nos enseñan en casa a pedir disculpas cuando sea necesario, pero como que no se hace mucho énfasis en el acto de perdonar; perdonar sin guardar rencores, sin traer al presente los errores del pasado y a pasar la página para continuar como si nada. Llegar al matrimonio sin entender este concepto y no saber como aplicarlo, te hace más difícil la convivencia tanto en discusiones fuertes como en cosas pequeñas. Ahora, imagíname a mi, recién casada, sin experiencia previa de perdonar realmente, con una paciencia reducida (siempre he sido así) y tener por costumbre hacer las cosas siempre a mi manera…no muy buen escenario. Pero en estos tres años puedo decirte que he aprendido a perdonar y a pasar la página. Lo aprendí gracias a mi esposo que tiene una paciencia enorme y desde niño aprendió a perdonar. Creo que su carácter y el hecho de que el amor perdona todo, ha tenido mucho que ver en mi crecimiento personal en ese aspecto.

El ser servicial: Esta es una de las facetas que más me ha costado y todavía la estoy trabajando y mejorando, el acto de servir a mi esposo. Creo que no hay nada más admirable que una persona que disfrute atender y servir a otra persona sin esperar nada a cambio. El estar dispuesta a servir 24 horas del día 7 días a la semana no era parte de mis fortalezas como mujer, pero al casarnos, cayeron sobre mi muchas tareas domésticas que no estaba acostumbrada a hacer y que no quería hacer. Lavar los platos, lavar la ropa, limpiar la casa, hacer mercado, cocinar, etc… De todas estas tareas, nada me produjo más estrés y ansiedad que el aprender a cocinar, a cocinar bien. Tener un esposo italiano, pone los estándares de cocina muy altos, a él le gusta todo bien sazonado y yo toda mi vida había comido simple y sin sal. En estos tres años decidí poner de mi parte y desarrollar el área de la cocina, con consejos de mi madre, mi suegra y los videos de YouTube, aprendí a cocinar muy bien. Y por lo menos en esa parte siento que puedo servirle a mi esposo y satisfacer a otra persona que no sea yo misma.

Estoy consciente de que me quedan muchos años por delante y lecciones por vivir y aprender como mujer, esposa y en el futuro, como madre. Sin embargo, el crecimiento personal que he experimentado en tan solo tres años de casada ha sido muy notorio en mi personalidad y en mi relación con el resto de mi familia y amistades. Me gusta poder ver hacia atrás y comparar a la Vanessa de antes con la Vanessa de ahora, mi espíritu feliz y rochelero no ha cambiado, pero la mujer que siempre dudé que llegaría a ser, ya es parte de mi presente y cada día la voy mejorando y perfeccionando. No cambiaría mi vida de casada por nada del mundo. Gracias Davi 🙂

 

Este artículo fue producido para Radio Cristiana CVCLAVOZ.

El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana

CVCLAVOZ

. El presente se escribió en su totalidad por un ser humano, sin uso de ChatGPT o alguna otra herramienta de inteligencia artificial.

CVCLAVOZ

Facebook
Twitter
Email
LinkedIn
WhatsApp

Los 5 errores más comunes al crear contenido cristiano

Conoce en este artículo los 5 errores más comunes al crear contenido cristiano de la mano de Gonzalo Mihail.

Renuncia para ganar

Que el enojo no sea quien controle nuestro actuar, sino que sea el dominio propio que Dios nos dio, actuemos con especial cuidado para ganar.

Días buenos y días no tan buenos

Siempre vamos a tener días buenos y no tan buenos y a los últimos podemos buscarles el lado positivo o permitir que nos arruinen el día.

Tiempo de lectura:

3 minutes

Autor

Comentarios

Topic

Likes

0

Deja un comentario