El comienzo de un nuevo año es un momento perfecto para reflexionar sobre nuestras relaciones y establecer metas y propósitos que nos ayuden a fortalecer nuestro vínculo como pareja.
En este artículo exploraremos cómo podemos enfocar nuestras metas y propósitos como pareja a la luz de la Palabra de Dios para guiar nuestro camino hacia un año nuevo lleno de amor y crecimiento. Prepárate con lápiz y papel para escribir las metas y propósitos que deseas para el 2024.
El porqué
Lo primero que necesitamos cuando establecemos metas y propósitos es saber la razón por la que queremos lograrlas. Una pareja unida, amorosa y saludable, es idea de Dios. Tener un hogar feliz es honrar a Dios y amarte a ti mismo. Es solo en relación a cómo te amas a ti mismo que puedes amar a los demás. En adición, una pareja saludable es un buen ejemplo para los hijos, la sociedad y el evangelio. Entonces empecemos a establecer metas y propósitos para lograrlo.
Entonces el Señor me dijo: «Escribe mi respuesta en letras grandes y claras, para que cualquiera pueda leerla de una mirada y corra a contarla a los demás.
Habacuc 2:2 NBV
Escribe tus metas y propósitos. Y establece el porqué quieres alcanzarlas.
Metas y propósitos como pareja
Cultivar el amor y la amistad
Cultivar el amor y la intimidad puede ser tu primera meta o propósito.
«El amor es algo que hacemos», nos dice el doctor Gary Chapman, escritor del libro Los 5 lenguajes del amor. Para fortalecer nuestra conexión emocional podemos establecer metas para pasar más tiempo de calidad juntos, ya sea a través de citas regulares, escapadas románticas o actividades compartidas que nos permitan disfrutar de la compañía del otro. Además, podemos explorar nuevas formas de mantener viva la chispa de la intimidad, sorprendiendo a tu pareja al tomar la iniciativa de vez en cuando.
Apoyo y compresión
Debemos entender que estamos jugando en el mismo equipo. Así de fácil y sencillo; cuando tu pareja gana, ganas tu también.
«El amor no se basa en el control, sino en el cuidado», afirma el Dr. Chapman. Una meta valiosa para el próximo año es trabajar en el apoyo mutuo y la comprensión. Podemos esforzarnos en escuchar más y hablar menos. Y en ser pacientes el uno con el otro, brindando apoyo emocional y alentándonos en nuestros sueños y metas individuales.
Modelar las Escrituras
Una meta para este nuevo año con tu pareja puede ser modelar las Escrituras en su relación amorosa. La Biblia dice:
El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
1 Corintios 13:4-7 RVR 1960
Puedes usar este pasaje y examinarte. Preguntarte:
- ¿Tienes envidia del éxito de tu pareja?
- ¿Te irritas fácilmente?
- ¿Exiges que siempre se haga tu voluntad?
- ¿Pasan las vacaciones donde tú quieres, comen en el restaurante que escoges, siempre buscas lo tuyo?
Recuerda que las Escrituras son lumbrera para nuestro camino. Examínate y establece como meta para este nuevo año que tu relación modele 1 Corintios 13:4-7.
Vuelve a enamorte
Para concluir nuestra lista de metas y propósitos, queremos motivarte a volver a enamorarte.
El célebre escritor C. S. Lewis nos deja una enseñanza para aquellas parejas que piensan que ya no están enamorados.
Dejar de «estar enamorados» no necesariamente implica dejar de amar. El amor en este otro sentido, el amor como distinto de «estar enamorado», no es meramente un sentimiento. Es una profunda unidad, mantenida por la voluntad y deliberadamente reforzada por el hábito; reforzada por (en los matrimonios cristianos) la gracia que ambos cónyuges piden, y reciben, de Dios. Pueden sentir este amor el uno por el otro incluso en los momentos en que no se gustan, del mismo modo que yo me amo a mí mismo incluso si no me gusto. Pueden retener este amor incluso cuando cada uno podría fácilmente, si se lo permitieran, estar «enamorado» de otra persona. «Estar enamorados» los llevó primero a prometerse fidelidad; este amor más tranquilo les permite guardar esa promesa. Es a base de este amor como funciona el motor del matrimonio: estar enamorados fue la ignición que lo puso en marcha.
C.S. Lewis