Es innegable que las redes sociales se han vuelto parte de nuestra vida. Aprender a manejarlas con sabiduría debería ser una prioridad, pues en ellas invertimos mucho de nuestro tiempo. Si cruzamos la línea entre el uso y el abuso del poder de expresión que nos ofrecen las redes sociales, podemos llegar a perdernos y ser reemplazados por una falsa identidad virtual. Para evitar este problema, debemos seguir los siguientes consejos:
1. Controla tus emociones: Es más sencillo expresar nuestras emociones, ya sean buenas o malas, en las redes sociales. Sin embargo, debido a la facilidad con la que podemos manifestarlas, no medimos las consecuencias futuras. Es fácil borrar un comentario destructivo, pero no es tan simple reparar el daño que se ha hecho. La próxima vez que vayas a publicar algo en la Internet, piensa bien en las consecuencias que tendrá. Después de todo, las personas que tienes en tus redes sociales están atentos a tu comportamiento, y esto puede afectar tu vida más de lo que imaginas.
2. Considera los beneficios: Preguntarse cuál es el beneficio de lo que publicamos, es una excelente forma de utilizar sabiamente las redes sociales. Nuestras publicaciones deben ir acorde a nuestras creencias, sin tener que ofender a los que no la comparten. En el caso de los agradecimientos, felicitaciones u honras, pueden ser muy útiles, pero tienen mayor efectividad si se dan en persona.
3. Crítica vs. Opinión: Muchos justifican las críticas al decir que solo es su opinión. No obstante, debemos evitar juzgar en base a la poca información que recibimos, y en cambio, pensar bien antes de criticar. Recordemos que debemos tratar a otros así como queremos ser tratados, y esto incluye las palabras que profesamos en las redes sociales.
Este artículo fue producido para Radio Cristiana CVCLAVOZ.