A este tiempo se ha visto todo tipo de mascarillas, pero una empresa israelí está haciendo la mascarilla más cara del mundo.
En lo que va del año se han producido mascarillas un poco más estéticas y llamativas. Se están usando diversos materiales y diseños para acomodarse a las necesidades de cada individuo. Sin embargo, una empresa llevó esto mucho más allá al lanzar una mascarilla que no cualquiera podría pagar.
La joyería Yvel situada en Motza, Israel, está haciendo una mascarilla de oro con incrustaciones de diamantes. Se estima que su precio será de 1.5 millones de dólares, lo cual significa que será la más costosa del mundo, hasta el momento.
¿Qué tiene la mascarilla más cara del mundo?
La mascarilla está hecha de oro blanco de 18 quilates; pero eso no es todo: estará decorada con 3.600 diamantes naturales blancos y negros.
Debido a que los diamantes y el oro son materiales pesados, se estima que pese 270 gramos; este peso es casi 100 veces más que una mascarilla normal.
Pese a que no parece proteger contra el coronavirus, dicha mascarilla contará con filtros N99.
El dueño de la mascarilla
El diseñador y propietario de la empresa, Isaac Levy, afirmó que esta mascarilla se está haciendo a pedido de un cliente. El comprador tuvo dos condiciones específicas para su mascarilla: debe terminarse para fin de año y debe ser la más cara del mundo.
Levy afirmó que se estima que esta pieza estará terminada en octubre y que el otro requisito fue fácil de cumplir.
Cuando se le preguntó quién compraría una mascarilla así, no quiso revelar la identidad del cliente; sin embargo, dijo que es un empresario chino que vive en Estados Unidos.
Cuando se le preguntó si él mismo usaría la mascarilla, confesó que aunque está agradecido por la oportunidad, no lo usaría. Asimismo afirmó:
El dinero tal vez no compre todo, pero si puede comprar una máscara COVID-19 muy cara y el tipo quiere usarla, caminar y llamar la atención, debería estar contento con eso.
Sharon Caro, directora de marketing de Yvel, explicó que el comprador es ≪uno de los clientes más veteranos de la compañía en las últimas décadas≫; y que es probable que no use la mascarilla, sino que lo tenga ≪como un artículo de colección con el fin de crear trabajo para los 150 trabajadores de Yvel en Israel y Estados Unidos≫.
Según los trabajadores de la empresa, la mascarilla más cara del mundo es ≪una pieza de arte≫, más que un simple protector facial.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.