Vivimos en una sociedad que parece ser una competencia para ver quién es el que sobrevive. Es por ello que muchos recurren a la mentira y el engaño para tomar ventaja de los demás y sobresalir a costa de otros. Esto se aplica en muchas áreas de la vida cotidiana, y es sorprendente el número de mentiras que podemos recibir a diario.
A menudo es difícil distinguir si te están mintiendo, sobre todo cuando se trata de una persona a la que uno no conoce bien. Para evitar ser engañados por una falsa promesa o historia, podemos aplicar los siguientes consejos.
4 maneras de saber si te están mintiendo
1. A un mentiroso le delata su lenguaje corporal
La boca puede decir una cosa, pero el cuerpo, otra. El lenguaje corporal es el modo de actuar natural que tiene nuestro organismo y siempre va acorde a nuestras verdaderas intenciones. Por eso es que si alguien muestra señales de nerviosismo, o su cuerpo demuestra rechazo ante lo que está diciendo, es porque es mentira. Por lo tanto, es importante que prestes atención a la conversación y observes cuidadosamente los gestos de la otra persona.
2. La mentira se nota en la mirada
Contrario a lo que muchas personas creen, los mentirosos no suelen evadir el contacto visual; más bien, miran cuidadosamente a su interlocutor. Esto se debe a que ellos quieren estar seguros de que su mentira ha sido creída. Sin embargo, esto no significa que todos los que te ven a los ojos son mentirosos, sino que actúan de esa manera en situaciones particulares.
3. Un mentiroso no puede contar la historia al revés
La mejor manera de saber si alguien miente es pedirle que te cuente la misma historia pero desde el final hasta el principio. Cuando alguien dice la verdad suele añadir detalles que había olvidado a medida que relata algo y puede repetir la historia contada al revés.
No obstante, los mentirosos construyen una historia simple y sin detalles para que puedan repetirla fácilmente, es por ello que no pueden contarla desde el final hasta el principio.
4. Quien miente dice muchos halagos
Una manera fácil de distraer la atención es con muchos halagos. Si alguien te halaga de forma excesiva es porque está intentando construir una mentira y desviarte del tema. Esto tampoco implica que debas de desconfiar de todo aquel que te elogie, sino que debes estar atento al contexto en el cual sucede esta situación.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.
Una respuesta
Yo como persona ciega que soy, pierdo los gestos corporales y el mirar a los ojos. Pero esto de volver sobre la historia que nos cuentan lo he practicado y da buenos resultados a la hora de saber si nos dicen la verdad o no. A pesar de como vivimos hoy, los cristianos debemos ser veraces siempre. Y esa es también una forma de dar testimonio de nuestra fe frente a quienes no conocen a Cristo.