La verdad siempre saldrá a la luz

No importa los esfuerzos que hagas ni quién te ayude a ocultar la verdad, ésta siempre saldrá a luz tarde o temprano.

Pues todo lo secreto tarde o temprano se descubrirá, y todo lo oculto saldrá a la luz y se dará a conocer a todos.
Lucas 8:17 (NTV)

Refrán japonés

«¿Puedes afrontar la música? » es una expresión de origen japonés y se origina con un hombre de mucha influencia en la corte que quería actuar delante del Emperador, pero no sabía de qué manera.

Un día, por fin se le ocurrió proponer al director de la banda real que le permitiese actuar con los músicos, pero la dificultad estaba en que no conocía ni una sola nota de música. Sin embargo, el director le permitió tener una flauta en sus manos y mover los dedos sin producir ningún sonido.

Pero un día la banda cambió de director y su sustituto quiso saber qué hacía aquel hombre en la banda. Primero fingió estar enfermo, pero finalmente tuvo que confesar el fraude consentido por su antecesor.

La verdad siempre saldrá a la luz, tarde o temprano

Por mucho que nos esforcemos en ocultar un mentira, la verdad siempre saldrá a la luz.

Muchas personas son conocidas como cristianas en sus comunidades pero no todas lo son, aunque quizás están sirviendo en sus iglesias, no todas viven de la manera en la que lo haría una persona que es seguidora de Jesús y de eso tendrán que dar cuentas a Dios.

Por eso es bueno preguntarnos, como personas, como cristianos, si podemos afrontar la música. ¿Realmente estamos preparados para desempeñar el rol que tenemos?

Si quieres hacer las cosas bien, deja de fingir que eres algo y prepárate para enfrentar de la mejor manera, con excelencia, el rol que deseas desempeñar.

Oración del día

Padre amado, gracias porque tus misericordias son nuevas cada día y me das la oportunidad de cambiar aquellas cosas que no te gradan y que me alejan de ti. Te pido perdón por todas las veces que te he fallado, que no me he comportado como un verdadero cristiano. Ayúdame a ser cada día más parecido a Jesús, en el nombre de tu amado Hijo, amén.