Recuerdo una escena graciosa del Dr. Chapatín, quién repetía para controlar sus impulsos nerviosos: “No me voy a enojar, no me voy a enojar, no me voy a enojar”; pero la realidad es que al final esto no funcionaba y terminaba golpeando con su bolsita a aquellos que lo ponían nervioso ¿Sabías que a veces actuamos de este modo?
“Tu vida no mejora por casualidad, mejora por acciones”
Muchas personas dicen: “quiero cambiar” Pero, ¿Qué hacen para cambiar su vida? Otro ejemplo, podría darse en aquellos que practican deportes extremos, ellos no pueden decir solamente “No me voy a caer, no me voy a caer, no me voy a caer”, si fuera así su vida estuviera en constante peligro; deben prepararse físicamente y usar todas las medidas de protección necesarias, como ser: cascos, sogas de calidad y otros; lo mismo debe suceder con nuestro carácter como personas.
La Biblia relata la caída del Rey Roboam y todo empezó por este motivo: “E hizo lo malo, porque no dispuso su corazón para buscar a Jehová.” 2 Crónicas 12:14 (RVR 1960) Roboam no quería esforzarse en lo bueno, simplemente se alejó de los mandamientos de Dios y comenzó a dar lugar a sus placeres, por lo que en su tiempo terminó en la ruina. Si bien nuestra naturaleza es la maldad y debilidad, el Señor por su parte nos enseña, corrige y transforma cada día.
Por consiguiente, el deseo de cambiar no es suficiente para mejorar nuestro carácter, la Biblia dice: “El alma del perezoso desea, y nada alcanza; Mas el alma de los diligentes será prosperada.” Proverbios 13:4 (RVR 1960) cambiar requiere de esfuerzo y dedicación por lo que no será fácil, pero si estás dispuesto puedes mostrar cambios en tu vida y avanzar hacia adelante.
Todos luchamos con nuestro carácter, esto debido a nuestra vieja naturaleza la cuál debemos ir cambiando poco a poco. ¿Cómo nos preparamos entonces? Por ejemplo, si eres enojón, pídele a Dios que te ayude a cambiar esta parte de tu vida, también pon de tu parte en prepararte, lee libros sobre cómo controlar el enojo, por ejemplo, para que te prepares a la hora de enfrentar situaciones que te estresan o confrontan tu carácter; recuerda que es una guerra a la que debes ir armado.
Por último, no olvides que el mundo es bendecido por personas que se dejan transformar por el Espíritu Santo, te animamos a tomar la decisión de ser alguien diferente cada día.
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.