Cuando estamos pasando por momentos difíciles y buscamos una palabra de consuelo, no hay mejor lugar que la Biblia. Las Sagradas Escrituras hablan del poder y la soberanía de Dios, y de cómo Él está en control de todo y no tenemos que temer.
Los siguientes salmos te impartirán paz para recordar que incluso en medio de los problemas, Dios siempre está contigo.
Salmos que te darán paz en medio de los problemas
Te pido ayuda Señor, y me respondes desde tu monte santo. Me voy a dormir tranquilo y sé que despertaré, porque el Señor me protege. Por eso no me asustaré aunque miles me rodeen para atacarme.
Salmos 3:4-6 (PDT)
Pero yo, Dios mío, confío en tu gran amor y me lleno de alegría porque me salvaste. ¡Voy a cantarte himnos porque has sido bueno conmigo!
Salmos 13:4-6 (TLA)
Tú, Dios mío, eres mi pastor;
contigo nada me falta.
Me haces descansar en verdes pastos,
y para calmar mi sed
me llevas a tranquilas aguas.
Me das nuevas fuerzas
y me guías por el mejor camino,
porque así eres tú.Puedo cruzar lugares peligrosos
y no tener miedo de nada,
porque tú eres mi pastor
y siempre estás a mi lado;
me guías por el buen camino
y me llenas de confianza.Aunque se enojen mis enemigos,
tú me ofreces un banquete
y me llenas de felicidad;
¡me das un trato especial!Estoy completamente seguro
Salmos 23 (TLA)
de que tu bondad y tu amor
me acompañarán mientras yo viva,
y de que para siempre
viviré donde tú vives.
El Señor es mi luz y mi salvación, entonces ¿por qué habría de temer? El Señor es mi fortaleza y me protege del peligro, entonces ¿por qué habría de temblar?
Salmos 27:1 (NTV)
Lo único que le pido al Señor —lo que más anhelo— es vivir en la casa del Señor todos los días de mi vida, deleitándome en la perfección del Señor y meditando dentro de su templo. Pues él me ocultará allí cuando vengan dificultades; me esconderá en su santuario. Me pondrá en una roca alta donde nadie me alcanzará.
Salmos 27:4-5 (NTV)
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El Señor protege a quienes lo siguen.
Él cuida de quienes ponen su confianza en su fiel amor.
Los salva de la muerte
y los reanima cuando están hambrientos.
Nosotros esperamos que el Señor nos ayude
porque él es nuestro apoyo y nuestro protector.
Porque lo amamos
y es el único en quien podemos confiar.
Señor, danos la misericordia
que esperamos.
Salmos 33:18-22 (PDT)
Le pedí a Dios que me ayudara, y su respuesta fue positiva: ¡me libró del miedo que tenía! Los que a él acuden se llenan de alegría y jamás pasan vergüenzas. Yo, que nada valgo, llamé a Dios, y él me oyó, y me salvó de todas mis angustias.
Salmos 34:4-6 (TLA)
El Señor siempre está dispuesto a ayudar a los que sufren y salva a los que han perdido toda esperanza. Si alguien es justo, no importa cuántos males sufra, el Señor lo rescatará.
Salmos 34:18-19 (PDT)
Dios siempre salva a los suyos; los que confían en él no sufrirán ningún castigo.
Salmos 34:22 (TLA)
Puse en el Señor toda mi esperanza; él se inclinó hacia mí y escuchó mi clamor.
Salmos 40:1-3 (NVI)
Me sacó de la fosa de la muerte, del lodo y del pantano; puso mis pies sobre una roca, y me plantó en terreno firme. Puso en mis labios un cántico nuevo, un himno de alabanza a nuestro Dios. Al ver esto, muchos tuvieron miedo y pusieron su confianza en el Señor.
¡Pero no hay razón
Salmos 42:5 (TLA)
para que me inquiete!
¡No hay razón
para que me preocupe!
¡Pondré mi confianza
en Dios mi salvador!
¡Sólo a él alabaré!
Si te gustaron estos Salmos que te darán paz en medio de los problemas, te recomendamos leer Versículos bíblicos para animar tu día
Nuestro Dios es como un castillo
Salmos 46:1-3 (TLA)
que nos brinda protección.
Dios siempre nos ayuda
cuando estamos en problemas.
Aunque tiemble la tierra
y se hundan las montañas
hasta el fondo del mar;
aunque se levanten grandes olas
y sacudan los cerros con violencia,
¡no tendremos miedo!
El Señor de los Ejércitos Celestiales está entre nosotros; el Dios de Israel es nuestra fortaleza.
Salmos 46:11 (NTV)
Oh Dios, ¡escucha mi clamor!
Salmos 61:1-4 (NTV)
¡Oye mi oración!
Desde los extremos de la tierra,
clamo a ti por ayuda
cuando mi corazón está abrumado.
Guíame a la imponente roca de seguridad,
porque tú eres mi amparo seguro,
una fortaleza donde mis enemigos no pueden alcanzarme.
Permíteme vivir para siempre en tu santuario,
¡a salvo bajo el refugio de tus alas!
Sólo Dios me da tranquilidad,
Salmos 62:1-2 (TLA)
solo él puede salvarme;
sólo él me da su protección,
¡jamás seré derrotado!
Sólo en Dios halla tranquilidad mi alma; sólo en él he puesto mi esperanza.
Salmos 62:5 (RVC)
Sí, sólo él es mi roca, y mi salvación; él es mi refugio. ¡Jamás habré de caer! Mi salvación y mi gloria proceden sólo de Dios. Él es mi refugio, la roca en donde ningún enemigo podrá alcanzarme.
Salmos 62:6-7 (NBV)
Te recomendamos leer Salmos acerca de la paz para que los recuerdes en medio de los problemas
Con todo mi corazón alabo al Señor;
Salmos 103:1-4 (PDT)
que todo mi ser alabe su santo nombre.
Con todo mi corazón alabo al Señor
y no olvides ninguno de sus beneficios.
Dios perdona todos mis pecados
y sana todas mis enfermedades.
Él salva mi vida de la muerte;
me corona de fiel amor y compasión.
Mi Dios es muy tierno y bondadoso;
Salmos 103:8-12 (TLA)
no se enoja fácilmente,
y es muy grande su amor.
No nos reprende todo el tiempo
ni nos guarda rencor para siempre.
No nos castigó como merecían
nuestros pecados y maldades.
Su amor por quienes lo honran
es tan grande e inmenso
como grande es el universo.
Apartó de nosotros
los pecados que cometimos
del mismo modo que apartó
los extremos de la tierra.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.