Durante una entrevista en el programa Energía total, el politólogo Agustin Laje nos explicó qué significa la batalla cultural; también mostró cómo han manipulado el lenguaje actual para promover ideologías post-modernistas.
La batalla cultural es una «disputa por los elementos de una cultura a través de las instituciones y dispositivos culturales», afirma Laje. Esto incluye las normas, las costumbres, tradiciones, creencias, valores, historias, mitos, ritos, los modos del lenguaje. Nosotros no actuamos al margen de nuestra cultura, todo lo contrario; por ende, controlar los elementos de la cultura significa impactar directamente en la conducta de las personas.
Estos cambios suceden gradualmente a través de los elementos de la cultura, como por ejemplo: colegios, universidades, medios de comunicación, redes sociales, iglesias, arte, música, series, etc. es ese el ámbito de la batalla cultural.
Agustin Laje: La batalla cultural es un término de moda
La batalla cultural es el término de moda, y Agustin Laje explica de la siguiente forma en su libro de que se trata:
Para hablar de batalla cultural es necesaria, entonces, la presencia de tres elementos característicos. Primero, el objeto de la batalla en cuestión es la definición de los elementos hegemónicos de una cultura. En ella no se lucha directamente por dominar un congreso, una empresa o un territorio por la vía militar, sino por dominar la cultura de una sociedad. Ahora bien, si la cultura es el fin de la batalla cultural, la cultura es al mismo tiempo su medio. Así, los medios a través de los que preponderantemente se desarrolla esta batalla estan compuestos por las propias instituciones dedicadas a la producción y reproducción cultural de la sociedad (escuelas, universidades, iglesias, medios de comunicación, arte, órganos de propaganda del estado, fundaciones, ect.).
Segundo, debe producirse un conflicto de magnitud en torno a la cultura que otorgue sentido al término «batalla». No hay batalla sin conflicto: se da batalla precisamente porque se nos agrede o bien porque se nos ofrece resistencia. El conflicto puede darse en paridad de fuerzas relativas, o bien puede resultar arrollador contra una resistencia muy débil y efímera. Sin embargo, aunque débil y efímera, alguna condición siempre es condición necesaria de cualquier batalla.
Tercero, la noción de «batalla» incluye un necesario componente de consciencia. En efecto, las batallas se llevan adelante con arreglo a estrategias y tácticas; las batallas se planifican y se direccional racionalmente. Las batallas culturales se suelen emprender con el objeto de dirigir cosmovisiones organizadas de manera consciente, ideologías integrales y sistemicas, e ideas y valores articulados orgánicamente, que impactan a la postre sobre la cultura.
La batalla cultural está muy en la palestra. La pregunta es: ¿entendemos lo que está en riesgo? Aquí compartimos la entrevista completa con el autor y filósofo argentino, para que conozcas los detalles del tema.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.