El sexo dentro del matrimonio es un regalo de Dios para complementar con deleite el compañerismo. Sin embargo cuando ese deleite se vuelve una obligación o cuando se descuida la relación íntima, el cónyuge puede resentirse. Si te estás preguntando por qué tu pareja no te desea sexualmente, a continuación trataremos de darte las razones más comunes desde la perspectiva femenina. Trabajar la conducta sexual juntos para afianzar los lazos matrimoniales no solo es esencial sino también bíblico.
Indiferencia en la mujer
«Bebe el agua de tu propio pozo; comparte tu amor únicamente con tu esposa.
¿Para qué derramar por las calles el agua de tus manantiales teniendo sexo con cualquiera?
Deben reservarla solo para los dos; jamás la compartan con desconocidos.Que tu esposa sea una fuente de bendición para ti. Alégrate con la esposa de tu juventud.
Proverbios 5:5-19 NTV
Es una cierva amorosa, una gacela llena de gracia. Que sus pechos te satisfagan siempre. Que siempre seas cautivado por su amor.»
Según la Dra. Cornelia Hernandez de Matos, en su libro Puro Sexo Puro, dice sobre el libro de Proverbios:
«[Los consejos] que el maestro sabio le brinda a su hijo sobre adonde ir a satisfacer sus necesidades sexuales de manera legítima. Una de las cosas que me maravilla de este pasaje es la forma hermosa en que se describe a la esposa. Aunque su lenguaje es simbólico y poético, resulta claro que está hablando de intimidad sexual y se celebra el rol de la mujer en ese escenario. La esposa es la persona exclusiva escogida por el esposo y con la que únicamente goza del disfrute sexual. El pasaje muestra a una esposa amante, que disfruta contenta el encuentro y embriaga de amor a su esposo.»1
Por qué tu pareja no te desea sexualmente
El comportamiento sexual es impulsado por los sentimientos, pensamientos y experiencias pasadas.
La mujer está diseñada, al igual que el hombre, para dar y recibir amor y para disfrutar las relaciones íntimas con su esposo. Te preguntarás entonces por qué los hombres se quejan de que su esposa no los buscan sexualmente. Según Dra. Cornelia, existen varias factores comunes para la falta de deseo sexual en la mujer:
- Una mente distraída.
- Observación física personal.
- Cansancio.
- Miedo.
- Vergüenza.
- Temor a ser sorprendidos.
- Conflictos no resueltos
- Razones físicas orgánicas.
- Expectativas.
Soluciones
Independientemente de la razón detrás de la falta de deseo sexual es importante recordar que el matrimonio y todas sus facetas fueron creadas por Dios. Y el diseño de Dios es bueno.
«Que sus pechos te satisfagan siempre. Que siempre seas cautivado por su amor.»
Proverbios 5:19 (NTV)
A pesar de entender que las relaciones sexuales en el matrimonio son un regalo de Dios, es probable que una desconexión obstaculice la intimidad que desean y te sigas preguntando por qué tu pareja no te desea sexualmente. Según la Dra. Cornelia:
«La respuesta sexual no es automática y puede ser potenciada o bloqueada. Cada mujer debe aprender a reconocer aquello que influye en cada etapa de su matrimonio. Uno de los factores de mayor impacto en la respuesta sexual femenina es la dinámica marital, la manera en que fluye la convivencia con los esposos» 2
El secreto
Es por eso que la conexión emocional será la clave para una dinámica sexual saludable dentro del matrimonio. Para lograr esta conexión en la pareja, practica intencionalmente:
-Desarrollar una conexión espiritual. Primero vertical: Dios y tú. Después horizontal: tu cónyuge y tú.
-Mejora la comunicación. Busca un tono de voz y un tiempo adecuado para decir las cosas. Sé sincero.
-Dale prioridad a tu relación.
-Muestra agradecimiento.
-Busca ayuda profesional para tratar los problemas difíciles o traumas del pasado. Rompe el silencio.
Por último, no olvides las disciplinas espirituales: Ora, lee las Escrituras y busca las promesas de Dios concernientes a la familia y el matrimonio.
Si eres un caballero, dile a tu esposa con interés que quieres contribuir a restablecer y restaurar lo necesario para mejorar la relación íntima. Si eres mujer, sé sincera y expresa a tu cónyuge los sentimientos, deseos y malas experiencias que te han robado el deseo sexual. Todo puede ser transformado por el amor y la libertad en Dios. Para el que cree todo es posible.