¿Se puede prevenir el autismo durante el embarazo? ¿Qué medidas deben tomar las mujeres para evitar esta situación?
Si bien es cierto que hay cierta parte biológica que ya viene directamente en el gen, también es posible reducir los efectos del autismo o prevenirlo durante el embarazo. Aunque las cifras de los casos de autismo en la última década han ido aumentando, la ciencia sigue avanzando hacia una posible cura.
El autismo es una condición neurológica y de desarrollo que comienza en la niñez y dura toda la vida. Sin embargo, los efectos se pueden reducir a medida que se trabaja con el niño.
Los tratamientos y las terapias permiten reducir la vida disfuncional e incrementar las habilidades del niño. No obstante, los avances científicos más recientes aseguran que hay ciertas recomendaciones que se deben tomar en cuenta para prevenir el autismo desde el embarazo.
El ingenuo cree todo lo que le dicen; el prudente se fija por dónde va.
Proverbios 14:15 (NVI)
El embarazo es la etapa en la que más se han encontrado diversos factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar autismo. Es por ello que cada mujer debe ser al pie de la letra todas las recomendaciones de su médico.
El ácido fólico ayuda a prevenir ciertos defectos graves de nacimiento, tanto del cerebro como de la columna vertebral del bebé. En otras palabras, los niños son menos propensos a ser diagnosticados con autismo si sus madres toman ácido fólico antes y durante el embarazo.
Para prevenir el autismo también es importante tomar multivitamínicos ya que estos pueden cubrir cualquier laguna nutricional en la dieta de la madre.
Las mujeres embarazadas que viven alrededor de campos donde hay un rocío constante de pesticidas tienen más probabilidades de que sus bebés tengan deformaciones y problemas neurológicos.
También se debe evitar el consumo de productos con residuos de pesticidas como las fresas, manzanas, cerezas, espinacas, berenjena, col, guisantes, espárragos, entre otros.
Para prevenir el autismo es importante comer comida orgánica antes, durante y después del embarazo. A fin de crear hábitos alimenticios saludables y que el niño también pueda crecer con ellos.
Otra de las cosas que hay que tener en cuenta para prevenir el autismo es asegurarse de tener un intestino sano. Si la mujer tiene una disbiosis o algún hongo en su intestino, aumenta la probabilidad de que, al momento del parto, el niño sea afectado y desarrolle problemas neurológicos o en parte intestinal.
El hecho de que una mujer esté continuamente expuesta a ciertas sustancias químicas durante el embarazo, puede aumentar los riesgos de autismo en su bebé. Aunque se necesita profundizar en más estudios, se recomienda limitar el consumo de alimentos enlatados, evitar las botellas de agua hechas de plástico o aluminio y mantenerse alejado de los productos para el cuidado personal que incluyen fragancia como ingrediente.
También te sugiero veas este video con contenido adicional sobre cómo prevenir el autismo durante el embarazo.
¿Crees que es posible prevenir el autismo durante el embarazo? Escribe tus ideas y comentarios. Recuerda que la persona más importante para ayudar a tus hijos, eres tú. ¡Tú puedes!
Si sospechas que tu hijo está dentro del espectro autista y quieres detectar el autismo, consulta urgente con tu pediatra. Envíame tus preguntas al correo electrónico: musikhope4kids@gmail.com
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.
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