Del amor y sus cosas

Del amor y sus cosas

La mayor parte de las personas ven el problema del amor principalmente como el de ser amado más que el de amar – la capacidad de uno de amar. Por lo tanto, el problema para ellas es cómo ser amadas, cómo ser objeto del amor de otro ser.

Erich Fromm, El arte de amar, Harper Perennial, Nueva York, 2006

No hay escasez de teorías, libros, novelas, cuentos, poemas, canciones, adoraciones y alabanzas acerca del amor. Así que agregar algo acerca del tema parecerá estéril a innecesario. Perdón por ofrecer más de lo mismo.

Durante una década al menos he estado contemplando con alguna atención este tema del amor. Es curioso que siempre que uno lo nombra la gente lo relaciona con algo que se siente respecto de alguien: Dios, cónyuges, parejas, amistad. Y siempre se lo piensa con relación a un intercambio: yo amo/soy amado, yo/quiero/soy querido/a.

Hace también una cantidad parecida de años que suelo citar una frase de la canción “Crímenes perfectos” de Andrés Calamaro: Todo lo que termina, termina mal. La escucho mientras escribo esta nota. Hasta hace un tiempo me refería a estas palabras con cierto cinismo. Pero creo que mi percepción ha cambiado con el tiempo. Ahora es más descriptiva.

Las cosas que terminan, terminan mal en el amor por lo que dice Erich Fromm: el problema del amor es entendido como el de ser amado. Las cosas terminan porque en el amor uno tiene más expectativas que ofrecimientos.

Esto, amigas y amigos, no ocurre sólo con respecto al amor romántico o sentimental —permítanme estos términos sólo para efectos prácticos—. También es con respecto de Dios, del trabajo o de la vida en la sociedad. Sentimos —más que pensamos— que no recibimos lo que esperábamos. Que las cosas no son como nos las habían descrito.

A la hora de reflexionar sobre el asunto, nos tenemos que remitir al pasaje favorito de nuestra audiencia: 1ª de Corintios 13. Una lectura desapasionada e inteligente del texto citado nos arroja una demoledora conclusión: el amor descrito ahí no tiene nada que ver con ser amado.

Tal vez haya que repetir esto ya que estamos tan ciegos a la evidencia: el amor descrito ahí no tiene nada que ver con ser amado.

En otros pequeños ensayos en este espacio podríamos quizá ampliar la reflexión y pensar juntos esto del amor y sus cosas.

El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana

CVCLAVOZ

. El presente se escribió en su totalidad por un ser humano, sin uso de ChatGPT o alguna otra herramienta de inteligencia artificial.

CVCLAVOZ

Facebook
Twitter
Email
LinkedIn
WhatsApp

¿Eres madre y te sientes culpable por trabajar?

¿Eres madre y te sientes culpable por trabajar? Hoy elaboramos al respecto. No estás sola. Este sentimiento surge en muchas mujeres.

Los milagros y las buenas obras no son tendencia

Los milagros y buenas obras no son tendencias. No son temas que compartimos. Hoy te invitamos a salirte del molde y hacerlos tendencia.

Lidiemos con la inmediatez

Lidiemos con la inmediatez porque se nos puede convertir en un síndrome que no nos va a dejar disfrutar realmente de la vida. Hagamos pausas.

Tiempo de lectura:

2 minutes

Autor

Comentarios

Likes

0

Deja un comentario