Jesús empleó muchas historias e ilustraciones similares para enseñar a la gente, tanto como pudieran entender. De hecho, durante su ministerio público nunca enseñó sin usar parábolas; pero después, cuando estaba a solas con sus discípulos, les explicaba todo a ellos.
Marcos 4:33-34 (NTV)
Esta versión de la Biblia te deja saber, en palabras fáciles, cómo debes hablarle en palabras sencillas a los que no conocen de Jesús.
Como puedes leer en estos versículos de Marcos, Jesús nunca enseñó sin parábolas. En el diccionario de la Real Academia Española, un parábola es la narración de un suceso fingido de que se deduce, por comparación o semejanza, una verdad importante o una enseñanza moral. En otras palabras, una parábola es una historia o anécdota contada para revelar una enseñanza. La peculiaridad de las parábolas —eso que las diferencia de las símiles y las metáforas—, es que no se pueden comprender a simple vista. Solo las comprenderán los que entiendan el lenguaje que ha sido expresado al contarla.
¿Cómo hablarle en palabras sencillas a los que no conocen de Jesús?
¿Cómo puedes hablarle en palabras sencillas a los que no conocen de Jesús? Para contestar esto te daré un ejemplo de lo que hacía Jesús.
Jesús conocía a qué audiencia se iba a dirigir antes de contarle las historias que transmitirían su enseñanza. Si la mayoría de su audiencia eran personas que construían casas o trabajaban en la agricultura en ese tiempo, les hablaba en ese idioma que los que construían casas o eran agricultores utilizaban. De tal forma, como les estaba hablando en un lenguaje que ellos podían entendía, comprendían el mensaje y obtenían la enseñanza.
En muchas ocasiones los maestros de la ley de Moisés le hacían preguntas a Jesús para ver si en realidad comprendía cómo seguir los mandatos escritos. Jesús siempre les respondía citando lo que estaba escrito en la ley para que ellos pudiesen comprender lo que él les quería enseñar. En otras palabras, Jesús les hablaba en su lenguaje.
Para compartir tu fe con los que no conocen de Jesús:
- Conócelos o solicita información de la audiencia.
- Evita hablar en palabras que solo alguien cristiano puede comprender.
- Simplifica tu lenguaje.
- Ponte en sus zapatos.
- Comunica las historias personales o de amigos de forma clara.
- Las historias deben ser en un idioma y lenguaje que tu audiencia comprenda.
- Haz preguntas al final para validar la comprensión de lo que quieres comunicar.
Si eres cristiano, y amas compartir a Jesús con los demás, estas recomendaciones te ayudarán a hablar de Jesús en forma sencilla.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.