¿A punto de rendirte?

¿A punto de rendirte?

Cuando la respuesta a nuestras oraciones no llega, podemos desanimarnos e incluso creer que Dios no nos escucha. Todo a nuestro alrededor parece sin esperanza y nuestro corazón desea rendirse, ¿te ha pasado?

Quizás te invaden pensamientos como: “¿Para qué sigo orando si Dios no me escucha?” o “Dios no me quiere, debe estar ocupado atendiendo a otras personas más buenas que yo”; y es así como las mentiras rodean nuestra mente cuando lo que esperamos no sucede.

Sin embargo, algo que debemos tomar en cuenta es que las Escrituras nos alientan a perseverar. David dijo: “Perseguí a mis enemigos y los alcancé; no me detuve hasta verlos vencidos. Los herí de muerte para que no pudieran levantarse; cayeron debajo de mis pies. Me has armado de fuerza para la batalla; has sometido a mis enemigos debajo de mis pies.” Salmos 18: 37-39 (NTV). El hecho de no detenerse hasta lograr su cometido nos indica que también nosotros debemos hacer lo mismo, orar hasta que veamos respuesta de Dios.

Si has dejado de confiar tus necesidades a Dios porque no viste Su respuesta a tus oraciones, quiero alentarte a que nuevamente te acerques de corazón a Él. Sé honesto al decirle cómo te sientes, pídele perdón y recibe de su ayuda para que seas perseverante.

No te rindas, toma aliento y sé perseverante porque Dios pelea las batallas por ti siempre y cuando estés orando.


El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.

El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana

CVCLAVOZ

. El presente se escribió en su totalidad por un ser humano, sin uso de ChatGPT o alguna otra herramienta de inteligencia artificial.

CVCLAVOZ

Facebook
Twitter
Email
LinkedIn
WhatsApp

Felicidad real y duradera

A veces creemos que la felicidad está en vivir el momento, pero el gozo real va más allá de eso, la felicidad real y verdadera está en hacer la voluntad de Dios.

Dones compartidos

Siendo que nuestros dones nos los dio, debemos usarlos para servirle, para servir a nuestro prójimo y vivir constantemente agradecidos por ese regalo.

Renuncia para ganar

Que el enojo no sea quien controle nuestro actuar, sino que sea el dominio propio que Dios nos dio, actuemos con especial cuidado para ganar.

Tiempo de lectura:

< 1 minute

Autor

Comentarios

Likes

0

Deja un comentario