Un pozo profundo del agua que sacia

Para reflejar a Jesús, parecernos más a Él y poder dar buenos consejos, buena guía a otros y tener disposición de hacer el bien siempre, necesitamos conectarnos con Él. Solo creyendo firmemente en Jesús seremos ese pozo profundo del agua que sacia y podremos saciar su sed.

Hay muchos versículos que hablan del agua en la Biblia y Jesús lo usó para referirse a Su Palabra, que es viva. Ese estar con Él y conocerlo mejor nos quitará la sed de cosas que no nos edifican, de cosas que nos pueden hacer daño. Es un proceso y una lucha, pero podemos vencer.

El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva. Esto dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en él; pues aún no había venido el Espíritu Santo, porque Jesús no había sido aún glorificado.

Juan 7:38-39 (RVR 1960)

Creyendo en Jesús, tendremos el deseo de que todos lo conozcan y crean en Él. Sentiremos que necesitamos rescatar a otros de la vida eterna en un lugar terrible. No podemos forzarlos, pero comportándonos amable y gentilmente, les podemos hablar de lo que significa para nosotros. 

Y el agua corriente de ríos es agua viva. En el libro de Jeremías se habla de que las aguas vivas fluyen desde Dios. En el libro de Juan, no podemos olvidar el encuentro de Jesús con la mujer samaritana, a la que habló de esa agua que sacia la sed por completo. Debemos procurar ser fuente de esa agua. 

Sin ahogar a nadie en ese pozo profundo, seamos del agua que sacia

Cuando te hablo de profundo, es para que sea un lugar de agua abundante. Eso necesitamos ser. Estar más profundamente ligados a nuestro Jesús. Conocer más de Él cada día para poder dar más de Él a todos. No descuides jamás tu relación diaria con Jesús. Conversa con Él cada vez que puedas. 

En tu rutina diaria, hazte el hábito de adorarlo, agradecerle y conversarle cada oportunidad que tengas chance de hacerlo. No descuides jamás esa relación. 

Yo digo que cuando me dicen que no tienen tiempo, es sencillamente que no Le están dado prioridad. Pon a Jesús de primero en tu lista de prioridades, por favor. 

La verdad es que por la manera cómo se habla de los ríos y las corrientes de agua en toda la Biblia es fácil pensar en la metáfora para hablar de recibir a Jesús. Podemos ver claramente nuestra nueva vida en Jesús como una corriente de agua que fluye, y de esa agua que sacia.

Es la libertad que nos da Jesús, ser agua que fluye nada más y nada menos que de Él pero, para hacerlo, sí necesitamos estar en constante relación estrecha con Él. No tenerlo ni como llamado de emergencias ni como una relación sin valor que olvidamos de a ratos. Aprendamos a disfrutar de Su presencia.

pero todos los que beban del agua que yo doy no tendrán sed jamás. Esa agua se convierte en un manantial que brota con frescura dentro de ellos y les da vida eterna.

Juan 4:14 (NTV)

Oración del día

Bendito Dios, comienzo esta oración dándote gracias por Tu bondad, generosidad y el privilegio de poder hablarte sin hacer citas ni los rituales que antes se requerían. Gracias por escucharme. 

Ayúdame a tener constancia en la lectura de Tu Palabra y en los tiempos de oración dedicados a ti. Hazme ser una fuente profunda de tu amor, tu paz y gentileza para que pueda yo darle a conocer a otros la maravillosa bendición que es recibirte en nuestro corazón. Gracias Señor, en el nombre de Cristo Jesús oro, amén. 

Aplicación

¿Cómo haces para darle prioridad a Dios, al tiempo con Él y al estudio de la Biblia en tu vida?

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El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ. El presente se escribió en su totalidad por un ser humano, sin uso de ChatGPT o alguna otra herramienta de inteligencia artificial.