Creo en el Amor –que es Dios– y que se ofrece al mundo sin límite y sin distinción alguna de personas. Creo en el aliento que Él exhala desde el comienzo de los tiempos y que nos imparte infinitamente la vida. Creo en su sinceridad cuando nos ha creado verdaderamente libres. Creo en la libertad con la que Cristo nos hace libres.
Creo en la libertad para entender personalmente el testimonio de las Escrituras aparte de intermediarios, porterías y vigilantes. Acudo a las palabras de Martín Lutero, tan venerado por los evangélicos:
A menos que sea convencido por el testimonio de las Escrituras o por razón clara (pues no confío en el papa o en el concilio, ya que es bien conocido que se han equivocado y se han contradicho a sí mismos con frecuencia), las Escrituras que he citado me obligan a mantenerme firme en esta posición, pues mi conciencia está cautiva a la Palabra de Dios. No puedo y no voy a retractarme de nada, ya que no es seguro ni correcto ir en contra de la conciencia. No puedo hacerlo de ninguna otra manera; aquí permanezco, que Dios me ayude, amén.
Declaración de Martín Lutero ante la Dieta Imperial de Worms, 16 de abril de 1521
¡Oh, creo en esa libertad más que en ninguna otra cosa porque ella emana del mismo Dios que nos ha creado y nos ha amado irresistiblemente!
Creo en que podemos escoger el bien o el mal sin condicionamiento alguno. Por lo mismo, creo que somos individual y socialmente responsables ante Dios y ante nuestros semejantes. No creo en chivos expiatorios ni en justificaciones metafísicas sobre la existencia del mal y el dolor de los que sufren
Creo a veces en forma casi demencial –aquí cito a Ernesto Sábato– en que las criaturas humanas pueden concertarse para hacer el bien, para traer justicia y paz. Porque no hay paz sin justicia. Isaías 32:17 lo declara así: Y el efecto de la justicia será paz.
Creo en que Dios nos ha dotado de razón para pensar nuestra fe, para pensar el mundo y para pensarnos a nosotros a la luz de Su palabra.
Creo también en la música, en la poesía, en las diversas manifestaciones del arte, en el ingenio humano. Creo en el amor, en la amistad y en el respeto.
Y en muchas cosas más…