Veamos en esta breve reflexión por qué afirmo que hacer lo correcto a veces no está bien. Mi querido amigo Jeffrey de León solía terminar una entrevista en su programa diciendo: “Ahora ve y haz lo correcto”. Es una noble admonición. Sería un mundo muy distinto si todas las personas hicieran lo que está bien.
Siempre me pareció, sin embargo, que esas palabras deben ser atendidas en su contexto. Hay ocasiones en que lo aparentemente correcto no lo es. Me propongo ofrecerles algunos ejemplos de este más preciso modo de considerar lo correcto.
Algunos ejemplos de corrección incorrecta
A veces la gente piensa que está haciendo lo correcto porque con ello protege a su familia, su reputación o cumple —supone— la Palabra de Dios. La iglesia en Alemania durante la Segunda Guerra Mundial hizo esta consideración y guardó “prudente silencio” frente a las atrocidades de Adolf Hitler. Tal vez aplicaron, incorrectamente eso de “sométase toda persona a las autoridades superiores”. Algunos autores sugieren, incluso, que se mostró colaborativa con el concepto de pureza racial.
Algo parecido ocurrió con la iglesia evangélica en Chile durante la dictadura de Pinochet. Hoy ella rechaza tal afirmación, pero la historia es rica en ejemplos. A cambio de ciertas ventajas y privilegios a los que no tenía acceso en relación con la iglesia predominante de la época, se mostró complaciente frente al corriente estado de cosas.
No está demás decir que, tanto en los casos mencionados de Alemania y Chile, hubo notables y nobles excepciones a la conducta mayoritaria de los cristianos de su tiempo.
Algunos ejemplos de incorrección correcta
Durante la misma época en Chile, cierto amigo trabajaba en una entidad de defensa de los derechos humanos. En una ocasión lograron sacar del país a alguien que estaba bajo amenaza de muerte, con un documento falso. Fue increpado duramente por la dirigencia cristiana por haber incurrido en una mentira como cristiano. Hay que preguntarse qué fue lo correcto aquí.
Habría que preguntarle a Jesús por qué no condenó a una mujer sorprendida en adulterio si lo correcto, según la ley vigente, era condenarla a muerte por lapidación. Este pasaje es por demás interesante, digamos de paso: si Jesús consideró correcto perdonarle la vida, ¿fue correcto que en el Antiguo Testamento fuera permitido apedrear a las adúlteras?
El amor es el que ordena hacer lo correcto
Volvamos a mi querido amigo Jeffrey. Estoy cierto que su recomendación de ir y hacer lo correcto es correcta. El amor siempre conduce a hacer lo que está bien. Incluso, a causa del amor, hay que hacer cosas que a primera vista parecen duras, como por ejemplo denunciar y abandonar a un cónyuge golpeador.
Se atribuye a San Agustín la frase “Ama y haz lo que quieras”. Hacer lo correcto debe ser siempre inspirado por el amor, aunque a los ojos de los demás, eso parezca incorrecto.
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido para radio cristiana CVCLAVOZ.