Si estás leyendo esto, es posible que sientas que te has alejado de Dios y quieres saber cómo volver a Él. No estás solo. Lo cierto es que por la prisa con la que vivimos, la cantidad de responsabilidades que adquirimos y las distracciones de cada día, es posible que nos alejemos de Dios.
Muchas veces sucede que todo está funcionando bien. Es cuando más agradecidos y conectados con Dios deberíamos estar, y, sin embargo, lo descuidamos. Pero no te desanimes, te vamos a decir cómo volver a Dios.
Primero debes reconocer que te has alejado, ese es el paso más importante. Una vez que reconoces que tienes la necesidad de volver a Dios, entiende que nada cambiará hasta que te sientas insatisfecho de estar donde estás, porque a veces llenamos nuestra vida de adquisiciones y logros, de premios, recompensas, reconocimientos y, sin embargo, nos sentimos vacíos.
Dios te ama, pero no obliga, tienes que decidir volver a Él
Si te has alejado de Dios, es importante que seas tú quien inicies el regreso. Dios tiene el poder de hacerlo, pero no se impone.
Decide volver a Dios, haz que ese sea tu objetivo. Puede que te hayas alejado haciendo cosas para llenar ese vacío del que hablamos previamente. Si vuelves, Dios llenará ese vacío que sientes.
Dios siempre está cerca de ti. Cuando te alejas, eres tú quien tiene que tomar la iniciativa de llamarlo y reiniciar tu relación cercana con Él. Eres tú quien dispone de su tiempo y decide sus prioridades. Por tanto, si quieres saber cómo volver a Dios, dale de tu tiempo y hazlo prioridad cada día.
«Busquen el reino de Dios, por encima de todo lo demás y lleven una vida justa, y él les dará todo lo que necesiten.»
Mateo 6:33 (NTV)
Buscando a Dios cada día, por encima de todo lo demás —como dice el versículo—, y tratando de ser mejor persona cada día, lograrás acercarte nuevamente a Él. Dios quiere darte todo lo que necesitas, y a veces necesitas entender que lo que más necesitas es una relación estrecha con Él.
Inicia tu día conectándote con Dios
Lo que más necesitas es una relación estrecha con Él. Decide conectarte a primera hora de la mañana con Dios. Apenas abres los ojos, dale gracias por el nuevo día, porque Sus misericordias son nuevas cada día para todos y por Su perdón y Su amor. Es la mejor manera de comenzar la jornada y te va a llenar de Su amor y protección para el resto del día.
No olvides agradecer por cada buen momento que tengas. Como deseas volver a Dios necesitas contactarlo más de una vez al día. Agradece en cada oportunidad que vayas a consumir algún alimento y dale gracias. Y antes de irte a dormir, agradécele porque lo ha hecho todo posible, y ponte en oración.
«No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho.»
Filipenses 4:6 (NTV)
Queremos que tú y tu familia aprendan cada día más a nuestro lado, por eso tenemos multitud de artículos cristianos en nuestra categoría Inspiracional que te fortalecerán.
Aprende más de Dios
Una excelente manera de volver a Dios es leyendo la Biblia. Es la manera en la que logras conocerlo más y estar seguro de cuáles son las cosas que le agradan y las que no. Comprométete a leer por al menos 5 minutos un libro de la Biblia, puedes comenzar por los Salmos.
«Pues la palabra de Dios es viva y poderosa. Es más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra entre el alma y el espíritu, entre la articulación y la médula del hueso. Deja al descubierto nuestros pensamientos y deseos más íntimos.»
Hebreos 4:12 (NTV)
Vuelve a congregarte
Otra manera de volver a Dios es volviendo cada a la iglesia y decidiendo rendirte totalmente a Él. Por lo general, cuando decidimos dejar de tener el control y lo cedemos a Dios, Él sabe que deseamos que se acerque y nos guíe. Y es en la iglesia donde aprendes más de Dios; por eso te invitamos a servirle con tus talentos en una comunidad de creyentes que comparten tu fe. Todo lo que hagas, hazlo para Él.
¿Cómo volver a Dios?
Esperamos ayudarte a volver a Dios siguiendo estos pasos todos los días. Nuestro deseo es que sientas la paz, alegría y confianza que nos da saber que somos amados por el Creador de todo lo que existe.
Volver al primer amor en Dios quizá te parezca difícil; pero cuando lo haces con un corazón arrepentido, el Señor está dispuesto a recibirte y sanar cada una de tus heridas. Vuelve hoy a Dios.