La energía que produce el cuerpo es de 100 w de calor, y una laptop en promedio consume 60 w de electricidad; entonces ¿es posible usar la energía de nuestro cuerpo para los aparatos electrónicos?
Aunque parece algo sacado de una película de ciencia ficción, un estudio publicado en la revista Science Advances, afirma que existe un nuevo dispositivo portátil de bajo costo que transforma el cuerpo humano en una batería biológica.
El dispositivo que usa la energía del cuerpo
¿Imaginas salir a correr o hacer ejercicio y usar el calor de tu cuerpo para cargar tu celular? Este escenario no es tan lejano como parece.
Investigadores de la Universidad de Colorado Boulder han desarrollado un dispositivo que se puede usar como un anillo, pulsera o cualquier otro accesorio que toque la piel. Este aparato puede generar alrededor de 1 voltio de energía por cada centímetro cuadrado de espacio de la piel.
La energía del cuerpo que recibe este dispositivo puede cargar la batería de relojes o rastreadores de ejercicios.
¿Cómo funciona?
Esta piel electrónica está hecha a base de un material elástico llamado poliimina. El dispositivo tiene una serie de chips termoeléctricos delgados en esa base, que se conectan a través de cables de metal líquido; por lo que el producto final parece una pulsera de plástico.
Jianliang Xiao, autor principal del nuevo artículo y profesor asociado en el Departamento de Ingeniería Mecánica Paul M. Rady en CU Boulder, explica que el dispositivo captura el flujo del calor del cuerpo:
Los generadores termoeléctricos están en estrecho contacto con el cuerpo humano y pueden utilizar el calor que normalmente se disiparía en el medio ambiente.
Otra ventaja de este dispositivo es que es reciclable y puede armarse por sí mismo si sufre algún corte. Además, para ser un invento nuevo, el costo no es elevado.
La tecnología del futuro podría funcionar con la energía del cuerpo humano
Si bien este invento está recién en sus inicios, ya está marcando una tendencia. La idea de los investigadores es crear aparatos electrónicos que usen energía que no dañe al planeta. Y si el cuerpo humano es una fuente de calor, podríamos usar el calor corporal para usar diferentes dispositivos.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.