El amor de madre es único

El amor de madre es único

La conexión que se logra entre una madre y su hijo hace que su amor sea único. Es capaz de sentir lo que siente su hijo y de que le duelan más a ella las cosas que le puedan pasar. Presiente cuando están mal y si están aún tan pequeños que no saben expresarlo, ellas lo entienden. Logran saberlo.

Una relación única

Las cosas que una madre es capaz de hacer por sus hijos no son comparables a muchas cosas que se pueden hacer por amor. Es capaz de dejar de comer para darle el bocado. Es capaz de dejar de darse gustos para darle los gustos al nene. Se esmera en atender a sus crías.

Cada año su madre le hacía un pequeño abrigo y se lo llevaba cuando iba con su esposo para el sacrificio.

1 Samuel 2:19 (NTV).

El haber tenido esa intimidad, de compartir su sangre, los latidos de su corazón y todo, mientras lo lleva en su vientre, hace de su relación algo único. Es un amor sin fronteras, con ternura como ninguna otra. Amor que algunos califican de locura porque es capaz de defender y cuidar apasionadamente.

Entonces la verdadera madre del niño, la que lo amaba mucho, gritó: «¡Oh no, mi señor! ¡Denle el niño a ella, pero, por favor, no lo maten!». En cambio, la otra mujer dijo: «Me parece bien, así no será ni tuyo ni mío; ¡divídanlo entre las dos!»

1 Reyes 3:26 (NTV).

Y en la vida animal vemos el amor de madre en cada criatura que es creación de nuestro Dios. Vemos el cuidado, las precauciones que toman, la manera cómo defienden a sus crías. Es impresionante y es reflejo de lo que es el amor de madre, un amor único.

Amor con disciplina

Y amando tanto a sus hijos, una madre sabe que debe disciplinar, debe ser derecha, directa y fuerte a la hora de requerirlo. Ora a diario por sus hijos y saca tiempo de donde puede para dedicarles y hablarles y llamarles la atención cuando lo necesiten. El amor de madre es único.

Padres, no hagan enojar a sus hijos con la forma en que los tratan. Más bien, críenlos con la disciplina e instrucción que proviene del Señor.

Efesios 6:4 (NTV).

No olviden entonces, padres, madres, criar a sus hijos con disciplina, instrucción y mucho amor. Ese amor protector y bueno que aprendemos de nuestro Dios. Mostremos entonces el amor único de madre y el amor sin igual de Dios.


El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.

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. El presente se escribió en su totalidad por un ser humano, sin uso de ChatGPT o alguna otra herramienta de inteligencia artificial.

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